El legado musical de Antonio José se custodia completo en el Palacio de Castilfalé
El Orfeón Burgalés acaba de ceder 9 partituras del músico, las únicas que faltaban en el catálogo del Archivo Municipal
El paquete está compuesto por 5 composiciones originales y 4 transcripciones corales de obras de grandes músicos
El Archivo las digitalizará, poniéndolas al servicio de investigadores y estudiosos, junto con el resto del legado
El Archivo Municipal de Burgos custodia ya en sus dependencias del Palacio de Castilfalé la colección completa de las obras de Antonio José, uno de los músicos “más reconocidos del siglo XX”, asesinado en Estépar al inicio de la Guerra Civil Española. El Orfeón Burgalés, del que Antonio José fue director, acaba de ceder al Archivo un total de 9 partituras, de las cuales 5 son originales del músico. La cesión se hace por un periodo de 10 años, aunque la “vocación” de la agrupación es que sea “permanente”, para que todo el legado musical de Antonio José esté unificado en el Archivo Municipal.
‘La Tarara’, ‘El piojo y la pulga’ o tres Cantigas de Alfonso X El Sabio, como composiciones originales, y el ‘Rondino’ de Beethoven o el ‘Andante ‘ de Mozart, como transcripciones corales, son algunas de las partituras que componen este último paquete de cesiones. Corresponden al periodo comprendido entre los años 1923 y 1936, según ha explicado Juan Gabriel Martínez, director del Orfeón Burgalés, quien recuerda que el músico las utilizó durante su etapa de director. Martínez destaca tanto las composiciones propias, por su valor original, como las “adaptaciones” para coro que realizó sobre obras de grandes músicos.
Las nueve partituras se encuentran completamente restauradas, labor que ha realizado el Orfeón con sus propios fondos. La obra que más ha trabajo ha llevado ha sido la de ‘La Tarara’, ha recordado Martínez, puesto que fue localizada hace algunos años en una carpeta abandonada en una dependencia del Orfeón tras las obras llevadas a cabo en la sede de la calle San Lorenzo. De este modo, restauradas, llegan al Archivo Municipal, donde se custodiarán y se digitalizarán, poniéndose a disposición de investigadores y amantes de la figura del músico burgalés.
Unidad de archivo
El directo del Orfeón insiste en que, dada la relevancia patrimonial de las partituras, lo más lógico era que estuviesen recogidas en el Archivo Municipal. Se trata no sólo de garantizar su conservación en perfecto estado sino también de ofrecer lo que los investigadores denominan “unidad de archivo”. Y es que no hay nada más “frustrante” para un estudioso que ponerse a examinar un catálogo de documentos incompleto, algo que hasta ahora ocurría con el legado de Antonio José. El Ayuntamiento se hizo con la mayor parte del mismo en el año 2005, de la mano de la familia, pero faltaban las partituras del Orfeón Burgalés.
De ahí la importancia que esta cesión tiene para la ciudad, tal y como ha recordado el alcalde, Javier Lacalle. A cambio de la misma, el Orfeón Burgalés recibirá una copia del legado del músico digitalizada por el Archivo, para que dispongan del material también a su servicio de estudio y trabajo musical. “La obra de Antonio José se encuentra en estos momentos bien custodiada”, reconoce el presidente del Instituto Municipal de Cultura, Fernando Gómez, quien ha recordado que el Archivo cuenta también con el piano, el cuadro y el busto del músico burgalés, cedidos por la familia y restaurados con fondos municipales.