El Parque Municipal de Viviendas da un paso más y ya dispone de reglamento

La Gerencia de Servicios Sociales se encargará de la gestión del proyecto, tramitando solicitudes y recibiendo los alquileres

Se destaca su carácter “rotatorio” y temporal, para uso prioritario de familias que han perdido su vivienda habitual

Los alquileres se adaptarán a los recursos de los beneficiarios, contando con ayuda municipal para cubrir el coste total

El Parque Municipal de Viviendas da un paso más y ya dispone de reglamento PAH y miembros de la corporación han presentado el documento. PCR

El consejo de la Gerencia de Servicios Sociales ha aprobado esta mañana el reglamento que regirá el Parque Municipal de Viviendas de Alquiler Social, una iniciativa conveniada semanas atrás entre el Ayuntamiento de Burgos y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). El documento, que deberá ser ratificado en el Pleno Ordinario del viernes, establece que será la propia Gerencia la que se encargue de gestionar el Parque de Viviendas hasta que se cree una Oficina de la Vivienda, recibiendo las solicitudes, tramitándolas, cobrando los alquileres y tratando directamente con los propietarios de los pisos.

De acuerdo con el reglamento, el parque estará destinado únicamente a personas o familias en riesgo de exclusión social por pérdida de la vivienda habitual y que requieran de una “vivienda temporal” en la que alojarse. El portavoz del PSOE, Daniel de la Rosa, ha recordado que tiene “naturaleza rotatoria”, es decir, “una vez desaparezca la necesidad” de esa vivienda, los inquilinos deberán abandonarla. Eso supone que cuando las condiciones laborales y de renta de los afectados mejoren, dejarán paso a otras familias en situación más desfavorecida.

Las bases que regularán los requisitos para los beneficiarios están elaborándose aún

Por ese motivo, y aunque las bases con los requisitos que deberán cumplir los beneficiarios aún están elaborándose por los técnicos, sí que se tienen muy claros cuáles van a ser los objetivos prioritarios. De la Rosa ha explicado que tendrán prioridad a la hora de acceder a una vivienda de alquiler social las familias que hayan perdido su domicilio. En segundo grado, aquellas que estén en riesgo de perderlo. Y, en tercer lugar, las que se encuentren en una situación de hacinamiento. De casos más extremos a otros menos perentorios, recuerda De la Rosa, dado que inicialmente se va a contar con pocas viviendas.

Abierto a todas las entidades

Y es que, cuando se ponga en marcha oficialmente el Parque Municipal, dispondrá de 8 viviendas cedidas por ‘la Caixa’, más otras dos de propiedad del Ayuntamiento. Desde la PAH reconocen que otras entidades bancarias están interesadas en participar, pero aún no han concretado cómo. Del mismo modo, el Consistorio hará un llamamiento a otras administraciones públicas para que se sumen a la iniciativa, mientras se compromete a ir incorporando nuevas viviendas, bien arrendadas previamente por los servicios municipales, bien de propiedad municipal y rehabilitadas.

Es ahí donde entrarían los 20 pisos del bloque ubicado en San Cristóbal y que el PSOE plantea que se rehabiliten en la primera fase del Área de Regeneración Urbana, para ponerlos al servicio del parque en 2017. Otra de las propuestas de los socialistas es aprovechar las viviendas vacías de la promoción de Cellophane, gestionada por el Consorcio del Desvío del Ferrocarril. De la Rosa reconoce que son muchas las alternativas, mientras que la concejal de Servicios Sociales, Ana Lopidana, asegura que se estudiarán todas. Por parte de Ciudadanos, Gloria Bañeres opta por ir supliendo carencias con arrendamientos municipales.

Subvención municipal

La PAH recuerda que se trata de una medida “muy paliativa”

Otra de las cuestiones que clarifica el reglamento es el alquiler que tendrán que pagar los beneficiarios del parque. La renta máxima no podrá superar el 1,5 por ciento anual del valor catastral de la vivienda, pero siempre se acomodará a los ingresos de los que disponga la familia. Se calcula que, de media, se pagará un alquiler de 160 euros, haciéndose cargo el Ayuntamiento de la diferencia con respecto a la renta que establezca el propietario del inmueble. Y es que entidades como los bancos pondrán un alquiler bajo, pero tampoco se pretende que sean ellos los grandes perdedores de la iniciativa.

Desde la PAH están satisfechos con el trabajo realizado, aunque recuerdan que es “un paso pequeño”. Se ha creado un marco estable para ayudar a los que más lo necesitan en materia de vivienda,  pero es una “medida muy paliativa”. Tendrá que ir creciendo para estar a la altura de las necesidades reales de la sociedad y, sobre todo, tiene que ir acompañada de políticas estatales y regionales que garanticen el derecho constitucional de accesos a una vivienda digna, ha recordado Rodrigo del Pozo, portavoz de PAH Burgos.

Mientras, se espera que los técnicos municipales acaben de elaborar las bases de acceso a las viviendas para poner en marcha el parque, aunque aún no hay fecha definitiva ni para lo uno ni para lo otro. “Lo más rápido que se pueda”, ha asegurado Lopidana, mientras que Daniel de la Rosa espera que pueda ser antes de que acabe el presente año. El Parque Municipal de Viviendas en Alquiler Social ha sido uno de los últimos logros de la PAH. La presión de  la plataforma consiguió unir a toda la corporación municipal, que en julio firmaba el convenio de colaboración.