La antigüedad de la flota forestal, principal incidencia de la campaña de incendios

El Colegio de Ingenieros de Montes recuerda que la Junta lleva 5 años sin renovar los vehículos de los agentes forestales

La maquinaria y los todoterreno han dado averías importantes este verano, obligando a realizar cambios en los operativos

La campaña de incendios forestales 2015 en la provincia ha sido especialmente buena, salvo por el fuego de Cornudilla

La campaña de incendios forestales de la Junta de Castilla y León, que concluyó el pasado 30 de septiembre, ha sido buena en la provincia de Burgos.  Incluso muy buena si nos centramos exclusivamente en la segunda mitad, de mediados de agosto hasta finales de septiembre. Sólo se ha producido un gran incendio forestal, el de Cornudilla en julio, puesto que el resto de fuegos que se han ido declarando durante el verano no se han salido de la lógica de esta época del año. Es el balance que hace Alfredo Rodríguez, el presidente del Colegio de Ingenieros de Montes de Castilla y León.

Rodríguez explica que, pese a los malos augurios de julio, cuando se concentró un mayor número de incendios que en campañas anteriores, el verano 2015 “no ha sido malo”. Y es que hay que tener en cuenta que el 2014 fue el mejor año de la serie histórica desde que se tienen estadísticas, y 2013 también de los mejores, recuerda Rodríguez. Así que para valorar los datos conviene observar la media de los últimos diez años. Y a falta de cifras oficiales, el presidente del Colegio de Ingenieros de Montes ya avisa de que 2015 estará por debajo de esa media.

A falta de datos oficiales, Rodríguez pronostica que la campaña estará por debajo de la media de los 10 últimos años

A destacar en Burgos, el incendio de Cornudilla, que se llevó por delante más de 200 hectáreas de arbolado y terreno agrícola, y que se habría producido a causa de una chispa de una motocicleta sin homologación mientras circulaba en una pista forestal. Es por ello que Rodríguez considera que la principal incidencia de esta campaña de incendios forestales han sido las averías que se han producido en algunos vehículos de agentes forestales, y que han afectado directamente a los operativos de incendios. No se han tenido consecuencias graves, reconoce, pero es que tampoco se han vivido situaciones de extrema emergencia.

Una flota envejecida

Vehículos, camiones, autobombas… El parque de forestales cuenta con maquinaria que supera los 200.000 kilómetros, e incluso los 300.000, y que habitualmente circula por el monte (pistas forestales, caminos en mal estado). Antes de la crisis, la Junta de Castilla y León solía renovar la flota con cierta asiduidad, en función del estado en el que se encontrasen los vehículos. Sin embargo, la renovación lleva parada unos cinco años, explica Rodríguez, así que ahora se cuenta con una flota envejecida y que empieza a dar importantes problemas. Las averías “ya no son anecdóticas, son algo más serio”, insiste.

Y es que este año, tanto en Burgos como en otras provincias, se han dado casos de agentes forestales que han tenido que utilizar su vehículo propio para hacer un servicio, o que han tenido que echar mano de un compañero para que se hice cargo de algún aviso al no disponer ni de vehículo oficial ni de vehículo propio. No son muchos casos, reconoce Rodríguez, y la incidencia en los operativos tampoco ha sido grave, pero es que la campaña en Burgos ha sido especialmente buena. En una situación de emergencia más compleja, esos fallos en el parque de vehículos habrían tenido mayores consecuencias.

Por ese motivo, el presidente del Colegio de Ingenieros de Montes de Castilla y León confía en que el nuevo consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, cumpla con su compromiso de elaborar un plan de renovación de la flota. Un programa para sustituir anualmente los vehículos que tengan que ser retirados, bien por antigüedad bien porque ocasionan muchas averías, de cara a que el parque esté siempre en las mejores condiciones. Además, con un plan de estas características, la Junta podría sacar lotes muy más grandes para la compra o el alquiler de vehículos, reconoce Rodríguez, abaratando costes.

Cuadrilla mejor organizadas

El presidente asegura que las averías no han ocasionado grandes problemas porque no ha habido emergencias graves

Sin embargo, el envejecimiento de la flota no es el único asunto que preocupa a los Ingenieros de Montes. Está también la falta de convenio de las empresas forestales, que son contratadas por la Junta para la realización de trabajos de mantenimiento forestal (limpieza, desbroces, repoblación) y, principalmente, la puesta a disposición de las cuadrillas. Rodríguez considera que, dado que trabajan para el Gobierno Regional, este debería exigir en los pliegos administrativos que las empresas cumplan con unas mínimas condiciones laborales.

Por cierto, las cuadrillas terrestres se han ido incorporando a la campaña de incendios 2015, tal y como había previsto el Colegio profesional, con retraso. Algunas no han llegado hasta mediados de agosto y, en ciertos casos, su ausencia no se ha suplido con la contratación temporal de personal de refuerzo. De todos modos, Álfredo Rodríguez explica que el próximo año no registrarán los problemas producidos en estos dos anteriores, dado que la ampliación temporal de los contratos, junto con los últimos concursos sacados por la Junta en agosto y septiembre, permitirá contar con cuadrillas fuera de la campaña estival.

El objetivo del nuevo plan del Gobierno Regional es que haya trabajando al menos una cuadrilla en cada una de las provincias durante todos los meses del año. Es por ello que los contratos no se han firmado por tres meses (los de verano), sino por cuatro, seis, ocho y diez. Y como las contrataciones se han producido de abril a septiembre, habrá cuadrillas todo el año. También para cuando comience la nueva campaña habrá equipos ya sobre el terreno, así que los retrasos en la incorporación sufridos en 2014 y 2015 se minimizarán.