Turalbur califica de “curiosos” los datos de pernoctaciones y visitas de extranjeros

La Asociación de Turismo Rural de Burgos no encuentra explicación a una caída del 10% en las pernoctaciones de agosto

Se muestran también sorprendidos por el incremento en el número de visitantes extranjeros, más del doble que en 2014

Siguen a la espera del programa regional contra los alojamientos ilegales y las campañas de promoción

Si bien las cifras oficiales no son nada halagüeñas, los establecimientos de turismo rural asociados en Turalbur aseguran que este verano han conseguido mantener la actividad con respecto a la experiencia del pasado año. Eso sí, están preocupados por la bajada tan importante en el número de pernoctaciones registradas en agosto, del 10 por ciento, y sorprendidos ante el incremento en los visitantes extranjeros, del 65,5 por ciento, asegura el presidente del colectivo. Y es que Francisco Hernansanz reconoce que no tienen explicación para ninguno de estos dos hechos.

Los turistas extranjeros fueron 3.139, más del doble que en agosto de 2014, siendo este el principal motivo por el que se ha incrementado el número de viajeros en términos generales, puesto que la diferencia de nacionales no llega a los 2.000. El Camino de Santiago y, sobre todo, la circunstancia de que hayan optado por un turismo rural para hacer parada en Burgos, de camino a otros destinos vacacionales, podrían ser algunas de las razones que explicasen estos números. Pero nada es seguro. Lo que sí parece más claro es que la caída en las pernoctaciones viene de la mano del turista nacional.

Los turistas nacionales han pernoctado mucho menos en 2015 que en 2014

Si en agosto de 2014 las pernoctaciones nacionales fueron 25.898, este año se han quedado en 22.811. Mientras, los extranjeros han pernoctado prácticamente lo mismo. Los datos son “curiosos”, a juicio de Hernansanz, pero no dejan de mostrar que algo hay que hacer para mejorar las cifras de turismo rural en la provincia de Burgos. Y es que, al fin y al cabo, el dato de ocupación media durante el mes de agosto ha sido del 23 por ciento. En Turalbur no tienen en cuenta que ese porcentaje suba al 32 por ciento en los fines de semana, ya que los negocios no viven de un fin de semana, de un puente o de una fecha concreta, insiste el presidente.

Y mientras se analizan los datos de esta última encuesta de ocupación, en Turalbur ya tiene la vista puesta en el otoño, una “época buena” para el sector. Esperan mejorar las cifras del año anterior, cuando sumaron viajeros y pernoctaciones prácticamente en todos los meses. Unos buenos datos que son necesarios para poder decir que el sector del turismo rural se va recuperando. Y es que no se puede tener sólo en cuenta periodos muy puntuales, como puede ser una Semana Santa, cuando luego se cierra el año con una ocupación de poco más del 10 por ciento, muy lejos del 25 por ciento necesario para que un negocio sea viable.

A la espera

Por otra parte, el presidente de la Asociación de Turismo Rural asegura que están a la espera de que la nueva consejera del ramo, Josefa García Cirac, ponga en marcha algunos de los proyectos pendientes. El colectivo profesional se reunión con ella a principios de septiembre, en un encuentro en el que García Cirac les aseguró que estaba trabajando en ese paquete de medidas anunciado por su predecesora para luchar contra los alojamientos ilegales. El compromiso de Alicia García se firmó en INTUR, a principios de año, pero todavía no se ha materializado, recuerda.

Turalbur insiste en que los alojamientos ilegales constituyen una fuente de competencia desleal

El sector quiere acabar con todos esos establecimientos que operan sin licencia o autorización, o que no cumplen con normativas de turismo rural y actividad hostelera. También con los múltiples casos de empresarios que no están dados de alta en la Seguridad Social, y de habitaciones que se alquilan por temporadas sin el control de la administración. No estamos sólo ante situaciones irregulares o ilegales, recuerdan desde Turalbur, sino que se crea también una competencia desleal, dado que este tipo de establecimientos se permite el lujo de bajar los precios,  al no tener que pagar impuestos o realizar inversiones.

Además, se va avanzando con la Junta de Castilla y León en el diseño de un plan de promoción de la nueva Central de Reservas, que ofrece muchos más servicios a los clientes pero que casi no tiene uso, porque se desconoce su existencia, insisten. Y también se han planteado diferentes alternativas para la promoción de las estrellas verdes, la nueva categorización impuesta por el Gobierno Autonómico, aunque no se han concretado. Hasta final de año cuentan los alojamientos para adaptarse a la normativa, pero es necesario que se realicen actuaciones para dar a conocer los cambios y en qué consisten.