El Ayuntamiento, expectante ante el concurso de acreedores de Arranz Acinas
El Equipo de Gobierno espera obtener información oficial a respecto del concurso de acreedores de Arranz Acinas para saber si afectará a algún contrato
Blasco asegura que podría no suponer ningún inconveniente
A la espera. La portavoz en funciones del Equipo de Gobierno, Carolina Blasco, y el alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, han asegurado hoy que el Consistorio aún no ha recibido notificación oficial a respecto del concurso de acreedores dictaminado por la Justicia a la constructora Arranz Acinas. Ambos responsables municipales, preguntados por la repercusión que podría tener la liquidación de la empresa, que mantiene varios contratos con el Ayuntamiento, han asegurado desconocer la situación por la que se atraviesa actualmente. “Es un poco precipitado hacer valoraciones”, ya que “no tenemos comunicación oficial”, ha destacado Blasco.
El Ayuntamiento cuenta con mecanismos para salvaguardar sus intereses en caso de liquidación
El Ayuntamiento cuenta con mecanismos para salvaguardar sus intereses en caso de liquidación
En este sentido, la portavoz municipal ha explicado que hasta que no se sepan los detalles de la resolución judicial, no se podrán analizar sus consecuencias. Eso sí, con la normativa y la experiencia sobre la mesa, “la entrada de una empresa en concurso de acreedores no tiene por qué afectar al desarrollo de los contratos” que mantenga con la administración. De hecho, insiste, en Burgos ha habido ejemplos de empresas que tras entrar en concurso han acabado cumpliendo los contratos.
Además, la situación de Arranz Acinas es peculiar, por cuanto que varios de los contratos que mantiene con el Ayuntamiento están formalizados a través de su participación en una unión temporal de empresas (UTE), que en sus estatutos particulares ya prevén la solución a este tipo de situaciones. A todo ello se le añade el hecho de que Arranz Acinas es un grupo formado por varias empresas que podrían actuar con cierta independencia en función de lo que dictamine el juez.
Garantías
Sea como fuere, desde el Equipo de Gobierno son conscientes de la posible aparición de un escenario mucho más complejo. Y es que, en el caso de que la empresa no pueda ofrecer “suficientes garantías” como para finalizar los trabajos para los que ha sido contratada, el Consistorio tiene la potestad de rescindir el contrato. Llegado el caso, serían los “servicios técnicos y jurídicos” del Ayuntamiento los que valoren esa posibilidad, según ha destacado el alcalde.
Con todo, la situación que atraviesa la empresa podría afectar directamente a varios contratos de cierta magnitud, como son el de mantenimiento de jardines (participado con Raga), la gestión del vertedero de Abajas o la reforma y rehabilitación de la vieja estación de tren (UTE Ferrovial-Aroasa).