La Universidad de Burgos recauda 1.400 eruos para un hospital en Potosí
La Comisión de Cooperación puso en marcha una campaña para conseguir aportaciones de miembros de la comunidad universitaria
El dinero recaudado se destinará a la construcción de un ala de Cuidados Paliativos destinada a enfermos terminales
El Hospital de Bracamonte presta servicio a una población de más de 800.000 habitantes y tiene muchas carencias
La Universidad de Burgos ha conseguido recaudar 1.484 euros para mejorar las instalaciones del Hospital Bracamonte en Potosí (Bolivia), en concreto para la construcción de un ala de Cuidados Paliativos destinadas a enfermos terminales. La Comisión de Cooperación de la UBU iniciaba entre miembros de la comunidad universitario una campaña, fundamentada en la creación de una aplicación y la organización de diferentes actividades, como la venta de productos del huerto ecológico. Campaña que ha dado muy buen resultado y ha demostrado el “compromiso social” de la UBU.
El Hospital Bracamonte es el único establecimiento de salud con especialidades e ingresos para todo el Departamento de Potosí, que cuenta con 800.000 habitantes, siendo además una de las capitales más ruralizadas del país, como consecuencia de la migración continua del campo. Todas estas características hacen que la estancia de un paciente, independientemente de su gravedad, tenga que ser muy corta. De ahí también que los pacientes más pobres con enfermedades terminales no son ingresados y se les da el alta médica para que sean trasladados a sus domicilios, en su mayoría en condiciones precarias.
En estas condiciones la persona muere sin una terapia de tratamiento del dolor y, en casos extremos, en la calle, ya que la familia no les acoge por todas las dificultades derivadas de la enfermedad. A iniciativa de las Hermanas del Huerto, congregación religiosa que trabaja con la población más pobre en el Hospital Bracamonte como profesionales sanitarios, se inició el proyecto de crear el ala de Cuidados Paliativos. Quedó inconcluso por falta de recursos económicos, pero ahora recibirá una inyección solidaria de mano de la comunidad universitaria burgalesa.