Gómez confirma el compromiso de la UTE de retomar las obras de la estación
Ferrovial-Aroasa les ha asegurado que volverán a trabajar la próxima semana, intentando recuperar el tiempo perdido
Gómez asegura que es el “mejor escenario” que se podía esperar, a pesar de las “presiones” para rescindir el contrato
Se sigue negociando con el Gobierno una salida para intentar mantener el 100% de los fondos del Plan Urban
Las obras están paradas desde el 22 de julio. MMC
La crisis de la estación del tren podría haber llegado a su fin, al menos en apariencia. Las reuniones mantenidas entre los representantes de la UTE Ferrovial-Aroasa, miembros del Ayuntamiento de Burgos y técnicos municipales han dado su fruto. La empresa se ha comprometido a retomar las obras de rehabilitación del edificio la próxima semana, si bien Fernando Gómez reconoce que “hasta que no lo vea no puedo certificar nada”. Por ello, en el Consistorio van a seguir muy de cerca ese reinicio de obras y su evolución, dado que la pérdida de fondos europeos del Plan Urban sigue pendiendo como la Espada de Damocles.
El presidente del IMC insiste en que este “es el mejor escenario que se podría esperar”. La UTE retoma los trabajos, asegurando además que intentará agilizarlos al máximo posible para recuperar el tiempo perdido, garantizando así que la mayor parte de la obra esté ejecutada y certificada para finales de año. La rescisión del contrato, que se ha barajado sobre todo por la “presión” de los grupos de la oposición, retrasaría “sine die” el proyecto, ha insistido Gómez, lo que hubiera hecho perder prácticamente todos los fondos del Plan Urban, ocasionando también un riesgo importante para la estructura abierta de la estación.
Problemas internos
Así que, tras “negociar” y hablar con la empresa, el Ayuntamiento ha conseguido que se cumpla con el contrato suscrito en su momento. Retomarán las obras y no se aceptará el modificado planteado, que ya había sido rechazado por los técnicos municipales. Gómez reconoce que la UTE ha alegado motivos de organización interna para justificar el parón de las obras, y el importante retraso acumulado, habiendo ejecutado sólo un 18,8 por cierto del total de los trabajos comprometidos hasta julio. El presidente del IMC asegura que “nosotros ni entramos ni salimos” en esas justificaciones, sólo quiere que se retomen los trabajos.
Además, Gómez insiste en que la postura del Ayuntamiento ha sido “clara y firme, en defensa de los intereses de la ciudad”. Se ha intentado asegurar el dinero público, así que ahora esperan que la UTE cumpla. Mientras, el propio Gómez continúa sus reuniones con miembros del Gobierno Central para intentar encontrar una solución a la pérdida de parte de los fondos europeos, dado que el 100 por ciento de la ayuda no se podrá justificar a tiempo. Se barajan varias soluciones, reconoce, pero todavía no es el momento de hacerlas pública. Eso sí, la prórroga ya ha quedado descartada, como aseguraba Gómez hace algunas semanas.
