Denunciado un varón por caza furtiva y taxidermia ilegal en La Ribera
El Serpona de la Guardia Civil imputa a un vecino de La Ribera por sendos delitos de caza furtiva y taxidermia ilegal tras localizar el taller en el que trabajaba
Se han incautado numerosas pieles y ejemplares naturalizados de animales
Parte de las pieles incautadas. BC
Agentes del Seprona de la Guardia Civil han imputado varios delitos contra la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad y a la Ley de Caza de Castilla y León a un varón de 68 años de edad que presuntamente se dedicaba a la caza furtiva y a la naturalización de especies silvestres, careciendo de las debidas autorizaciones.
Una patrulla del Seprona desplazada en Huerta del Rey tenía conocimiento días atrás de unas posibles prácticas de taxidermia ilegal, llevadas a cabo en un garaje de una localidad de La Ribera. Las pesquisas practicadas para localizar el local dieron resultado positivo, realizando una inspección en su interior, en presencia de su titular, que permitieron hallar varias pieles en proceso de tratamiento. Las mismas estaban dispuestas sobre somieres, que hacían las veces de perchas, sobre los que estas se mantenían estiradas y secándose.
En la misma estancia se encontraron dos ejemplares de ave rapaz, que habían sido naturalizados por taxidermia de cuerpo entero. Junto a las pieles, se halló un perchero fabricado con la piel y las patas de un jabalí, que pudiera haber sido abatido en periodo de veda y con munición no autorizada.
Al solicitarle la documentación o precintos que amparasen la lícita captura, transporte y tenencia de los animales, no pudo mostrarlos por no poseerlos.
En total, los agentes han intervenido una piel de ciervo (Cervus elaphus), otra de garduña (Martes foina), otra de zorro (Vulpes vulpes) y otras tres de corzo (Capreolus capreolus), así como un perchero fabricado con piel y patas de jabalí (Sus scrofa), un ejemplar naturalizado de búho chico (Asio otus) y otro más de azor (Accipiter gentiles).