Las brigadas contra incendios forestales mantienen la convocatoria de huelga

No se han producido avances en las negociaciones con Tragsa, así que continuarán con las movilizaciones previstas

Se mantendrán reuniones los días 23, 27 y 29 de julio para analizar cada una de las reivindicaciones planteadas

Desde CC.OO recuerdan que, aún de huelga, muchos profesionales han participado como voluntarios en incendios

Las brigadas contra incendios forestales mantienen la convocatoria de huelga Las BRIF son uno de los cuerpos fundamentales en la extinción de incendios. MAGRAMA

Las negociaciones entre Tragsa y las Brigadas de Refuerzo contra Incendios Forestales (BRIF) continúan abiertas, y sin visos de avances significativos. El pasado viernes se mantuvo la quinta reunión entre la dirección empresarial y los representantes de los trabajadores, en la que se cerró un calendario de encuentros para estudiar, de manera independiente, cada una de las tres reivindicaciones que realiza el colectivo. Las reuniones tendrán lugar el 23, el 27 y el 29 de julio, y puesto que no se han producido cambios en la actitud de Tragsa, la huelga indefinida convocada para el próximo lunes se mantiene en pie.

La empresa, que se encarga de gestionar un servicio que depende directamente del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente (MAGRAMA), ha sido la que ha puesto las fechas para los encuentros, según explica Jorge Nieto. El representante de CC.OO recuerda que podía haber intentado que las reuniones se celebrasen todas ellas durante esta semana, a fin de buscar un acuerdo que permitiese desbloquear el conflicto. No ha sido así, y teniendo en cuenta que de la reunión del viernes no se sacó ningún avance, el colectivo mantiene una convocatoria de huelga indefinida, que ya aprobó a principios de junio.

En proceso

CC.OO recuerda que Tragsa podría haber fechado los encuentros antes del 27 de julio pero no ha querido

El primero de los encuentros, el que tendrá lugar este jueves, abordará temas económicos. Los profesionales reclaman una subida a sus “irrisorios” salarios (entre 850 y 900 euros al mes, sin sumar los pluses que ahora les quieren quitar), pero ya se han intercambiado varios documentos entre sindicados y empresa. Así que como no quieren seguir “jugando al regateo”, afirma Nieto, se le ha pedido a Tragsa que presente un documento en el que deje claras cuáles son las funciones que quiere que realicen las BRIF, tanto en verano como en invierno, y a partir de ahí serán los sindicatos los que realicen una propuesta salarial.

Luego llegará el momento de negociar la creación de una 2ª actividad, destinada a todos esos compañeros que no pasan las pruebas físicas requeridas para mantenerse operativos. El  objetivo es facilitarles una salida laboral y que realicen también labores de apoyo que siempre son necesarias. Desde Tragsa rechazan la propuesta, asegura Nieto, alegando que la empresa está en ERE (presentado el año pasado pero declarado nulo, recuerda el representante sindical). Desde CC.OO han planteado la creación de una “hucha”, al estilo de los planes de pensiones, a cubrir entre Tragsa, el MAGRAMA y los trabajadores.

Y finalmente, el miércoles 29 se reunirán para hablar de la categoría profesional. Las BRIF insiste en que se les reconozca como bomberos forestales, y no como peones de montes, pero Tragsa pasa la responsabilidad al Gobierno Central. Jorge Nieto no duda de que deba ser el Estado el que modifique su categoría profesional, pero asegura que ayudaría mucho que la empresa ya lo hiciese en su convenio colectivo. El ‘no’ de Tragsa se ampara en que temen que, una vez conseguida la categoría, los profesionales quieran equiparar salarios y libranzas a los de los bomberos, y Nieto insiste en que “no es nuestra intención”.

Éxito

Jorge Nieto recuerda que las BRIF llevan desde agosto del pasado año con estas reivindicaciones, pero tanto Tragsa como el MAGRAMA les han dado largas, hasta obligarles a las convocatorias de huelga. Las tres jornadas de paros realizadas la semana pasada fueron un éxito, con un seguimiento de entre el 90 y el 100 por cien. Y eso a pesar de los “abusivos” servicios mínimos, del 70 por ciento. Aún así, Nieto insiste en que las brigadas son vocacionales y muchos de sus compañeros, aún estando de huelga, se movilizaron para ayudar, como voluntarios, a los operativos de incendios extendidos, por ejemplo, en Toledo o León.