Los mil y un “detalles” pendientes en el Coliseum
La Dirección Facultativa señala hasta medio centenar de “cuestiones” pendientes de “ejecución, arreglo o sustitución”
Los técnicos insisten en que deberán estar subsanadas para cuando el Ayuntamiento “reciba” las obras concluidas
El acta de ocupación contaba con los informes favorables de los técnicos, Bomberos, Seguridad Ciudadana e Ingeniería
Las apariencias engañan y todavía queda mucho trabajo por hacer. GIT
Eliminación del óxido detectado en la estructura y en la cubierta; revisión de los paneles y vidrios de la fachada ante la presencia de golpes y desperfectos; eliminación de barreras arquitectónicas; comprobación de los sistemas eléctricos, de fontanería y saneamiento; localización de los elementos de protección contra incendios; resolver los problemas de numeración de los asientos; repintar las barandillas; rematar el forrado de las escaleras… Medio centenar, ‘grosso modo’, de “detalles” quedan aún pendientes en las obras de remodelación del Coliseum, a pesar de su apertura el pasado 27 de junio.
El Ayuntamiento de Burgos conseguía la semana pasada, “in extremis”, el acta de ocupación de las instalaciones, que permitía utilizar legalmente el espacio a pesar de que las obras aún no se han finalizado. Según plantea el informe de la Dirección Facultativa al que ha tenido acceso BurgosConecta, fechado el pasado 26 de junio, las obras “se encuentran ejecutadas en condiciones de ser ocupadas para el fin que se pretende”, esto es, la celebración de la feria taurina. Y así lo explica también el concejal socialista Antonio Fernández Santos, que ha examinado los documentos.
Las obras se encontraban ejecutadas “en condiciones de ser ocupadas” pero con “cuestiones pendientes”
Eso sí, la Dirección Facultativa acompañaba su informe con un “escrito recopilatorio” en el que se ponía de manifiesto la existencia de alrededor de medio centenar de cuestiones pendientes de “ejecución, arreglo o sustitución”. “Detalles”, como los denominó el alcalde, Javier Lacalle, durante su visita al Coliseum, que tendrán que estar “subsanados” para cuando el Ayuntamiento “reciba” las obras. Advertencia que realizan tanto los técnicos de Fomento como los responsables del Estudio de Ingeniería Civil (EiC), uno de los redactores del proyecto de remodelación.
El listado engloba “cuestiones” que afectan prácticamente a todos los elementos del Coliseum: graderío, fachada, estructura, equipamiento, accesibilidad, sistemas de saneamiento o electricidad, iluminación, accesos, seguridad o gestión de residuos. En algunos casos, la Dirección Facultativa señala únicamente la necesidad de comprobar que no existen desperfectos o que se ha cumplido con el plan de obra. En otros, se pide expresamente que se hagan “reparaciones” o “arreglos”. Además, se recuerda la necesidad de “aportar todos los certificados, ensayos y pruebas realizados” para garantizar la calidad de las instalaciones.
Manchas de óxido
Entre los apuntes señalados por los técnicos cabe destacar la presencia de “machas óxido” en la estructura, los forjados y la cubierta, como en su día denunciase el PSOE. Si bien se reconoce que se pueden deber al manipulado de los elementos, el informe insiste en que el óxido debe ser “eliminado” y los elementos repintados, considerando también necesario que se compruebe que no existe ningún otro motivo subyacente para la aparición de la oxidación, que pudiese generar problemas una vez entregada la obra al Ayuntamiento.
El informe señala la necesidad de “revisar las manchas de óxido”, “eliminarlas” y “repintar” las estructuras
Con respecto a la cubierta, el informe señala que se debe solucionar el problema del “cabeceo” de la estructura en la parte inicial de la pasarela de acceso y recuerda que el lucernario central deberá ser instalado. También tendrán que revisarse los paneles y vidrios de la fachada, “ya que existen elementos golpeados que han de reponerse”, y la integración en esa fachada de la solución de evacuación de humos del grupo electrógeno, que se instalará para el sistema de calefacción, uno de los proyectos que se realizará en los próximos meses.
Arreglos en el graderío
En el graderío, la UTE Sacyr-Río Vena tiene todavía mucho trabajo por delante. Repintar las barandillas, arreglar piezas sueltas, eliminar aristas, comprobar que los elementos instalados “calzan” correctamente, sellar juntas, subsanar los problemas de desprendimientos, rematar el forrado de las escaleras y, por lo que se refiere a los asientos, solucionar los problemas de numeración y los derivados de una ubicación inadecuada de dificulta o impide la visibilidad de la pista o coso, sin olvidar sustituir aquellos que están rotos o despegados, debido a una “deficiente colocación”.
Los accesos a las propias instalaciones, a la pista, a la zona de enfermería o a los baños deberán también ser revisados, a fin de cumplan con la normativa de accesibilidad, estén adecuadamente nivelados y sean seguros. Asimismo, el Ayuntamiento tendrá que comprobar que se ha cumplido con el proyecto en los asuntos relativos a la fontanería, con renovación de los sistemas y canalizaciones y puesta en servicio de los aseos. Y también revisar que la iluminación de la pista y las gradas funciona correctamente.
Seguridad garantizada
Bomberos y Seguridad Ciudadana emitieron sendos informes sobre el plan de autoprotección y los sistemas contra incendios
De mayor o menor envergadura, pero el medio centenar de “cuestiones” marcadas por la Dirección Facultativa muestran que aún queda trabajo por hacer en el Coliseum, cuando se supone que las obras deberían haberse concluido en mayo. La UTE Sacyr-Río Vena ha solicitado hasta dos prórrogas y, a fecha 26 de junio, cuando se firmó el acta de ocupación, los trabajos todavía no habían finalizado. Eso sí, la puesta en servicio provisional de las instalaciones se hizo con total seguridad, como subraya en todo momento el informe de Fomento.
La Gerencia no sólo facilita el acta de ocupación ante el reconocimiento, por parte de la Dirección Facultativa, de que las obras “se encuentran ejecutadas en condiciones de ser ocupadas”, sino también en base a la existencia de los informes del Área de Seguridad y Emergencias, Bomberos e Ingeniería Industrial, que certificaban la existencia del Plan de Autoprotección, los sistemas de protección contra incendios y de seguridad, y una instalación eléctrica que cumplía con la normativa. Instalaciones seguras, sí. A medio terminar, también.
