El claustro alto de la Catedral culmina su restauración y se abre al público
Finalizan los trabajos de restauración de los pasillos este y sur del claustro alto de la Catedral, que hoy mismo ha sido abierto al público
El Cabildo, la Fundación Caja de Burgos y la Obra Social La Caixa han financiado los trabajos, que se han alargado casi tres años y han costado 1,15 millones de euros
Falta por rehabilitar las capillas de Santa catalina y del Corpus Cristi y el transaltar
Muchos años después, los visitantes podrán volver a disfrutar íntegramente del claustro alto de la Catedral. Esta misma mañana se ha abierto al público una de las joyas ocultas de la Seo burgalesa, que durante mucho tiempo ha pasado totalmente “desapercibida” debido al mal estado de conservación que presentaba, con humedades y suciedad incrustada en los muros. Un estado que en 2012 motivo un acuerdo a tres bandas entre el Arzobispado, la Fundación Caja de Burgos y la Obra Social de La Caixa cuyos resultados brillan hoy con todo su esplendor.
La restauración ha permitido recuperar buena parte de las policromías originales
La restauración ha permitido recuperar buena parte de las policromías originales
Y es que, después de casi tres años, los trabajos realizados en las alas este y sur del claustro han permitido rescatar del olvido innumerables policromías y elementos hasta ahora ocultos. Según ha explicado José Manuel Álvarez, arquitecto responsable de la obra, se ha procedido a limpiar todos los elementos, eliminando en muchos casos morteros sobrantes y rellenando los volúmenes perdidos por el paso del tiempo. Asimismo, se han recuperado muchas de las policromías originales ocultas bajo siglos de suciedad y se han limpiado las vidrieras, que ahora aportan mucha más luminosidad a “una de las piezas más importantes de toda la Catedral”.
Finalizados los trabajos, las palabras que más se repiten son “orgullo” y “satisfacción”. El propio presidente del Cabildo, Juan Álvarez de Quevedo, ha asegurado que el de hoy es un “día histórico” para la Seo, ya que los burgaleses y los visitantes podrán volver a “contemplar” una de sus joyas arquitectónicas.
En total, la restauración de ambas alas ha supuesto la inversión conjunta de 1,15 millones de euros, que se suman al ingente montante económico movilizado previamente para la recuperación de todos los elementos ya restaurados, entre los que Álvarez de Quevedo ha destacado, por su importancia histórica y arquitectónica, el cimborrio y la capilla del Condestable.
Recta final
Ahora, una vez concluida la restauración del claustro alto, la Catedral ha entrado definitivamente en la fase final de la restauración integral que comenzó hace dos décadas. Después del intenso trabajo que se ha ido realizando tanto en el interior como en el exterior de la Seo, tan sólo queda pendiente rematar tres puntos concretos, como son las capillas de Santa Catalina y del Corpus Cristi, así como el transaltar, tres obras que se espera acometer a lo largo de los próximos años.
En este sentido, el presidente del Cabildo ha confirmado que la primera en afrontar los trabajos de restauración será la capilla de Santa Catalina, cuya obra está presupuestada en unos 420.000 euros, de los que la Fundación AXA financiará 150.000. Más dificultades para encontrar financiación está teniendo el proyecto de restauración de la capilla del Corpus Cristi, presupuestada en 260.000 euros y para la que se está llamando a la puerta de la Fundación Santa María la Real. Por su parte, el Cabildo también está negociando ahora mismo con la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, que acaba de encargar el proyecto de restauración y mantenimiento del translatar.
En todo caso, y visto que el propio Álvarez de Quevedo no se ha atrevido a aventurar plazos para la ejecución de las tres obras, todo hace indicar que habrá que esperar todavía algunos años para ver concluida la restauración integral de la Seo burgalesa.