Los productores de patata de siembra analizan los nuevos retos del sector
La asociación nacional organiza en Burgos una jornada técnica sobre importación, normativa europea o tendencias de mercados
El sector está preocupado por la cada vez mayor presencia de semillas procedentes de países del norte de Europa
Además, la UE controlará la multiplicación lo que puede perjudicar a los productores que importan las semillas de base
La caída de la demanda nacional, el incremento de las importaciones o las nuevas normativas europeas son los principales asuntos que preocupan a los productores de patata de siembra. Un colectivo que se ha reunido esta mañana en Burgos, en una jornada técnica organizada por la Asociación de Productores de Patata de Siembra de España (APPSE), conformada por 15 socios, entre cooperativas, empresas y autómomos, y que representa al 85 por ciento de la superficie destinada a la patata de siembra en el territorio nacional.
Su presidente, Javier Fernández, explica que la entrada de semilla procedente de países del norte de Europa están reduciendo la cuota de mercado español. De hecho, el 85 por ciento de las necesidades de los productores de nuestro país se cubren con las semillas que llegan de Holanda. Y el motivo no es otro que la especialización y la amplia variedad con la que trabajan ellos. Fernández echa en falta más I+D+i en el sector nacional, puesto que con innovación otros países han sido capaces de generar semillas más atractivas para su cultivo y el consumo.
Dependencia exterior
El 85% de la patata de siembra que se utiliza en España procede de Holanda
Además, los productores de patata de siembra tampoco se han profesionalizado ni se han unido para la defensa del sector, “para potenciar lo nuestro”, asegura Fernández, cómo si se ha hecho en otros países. Tenemos un buen producto, pero no sabemos venderlo, por lo que hacer frente a una cada vez mayor importación es complicado. Y las nuevas normativas de la Unión Europea tampoco van a ayudar mucho a los productores españoles a la hora de recuperar el mercado nacional. A partir de 2016 se contará con nuevas normas sobre multiplicación de patata de siembra, que afectarán directamente a nuestro país.
Y es que la semilla de base, que se utiliza para producir la patata de siembra, se importa también en gran medida, por lo que los mayores controles que exigirá Europa repercutirán directamente en el colectivo nacional. Es por ello que Javier Fernández aboga por una menor dependencia de los mercados exteriores, y para ello se debe apostar por una mayor profesionalización del sector. Al mismo tiempo, la Asociación de Productores de Patata de Siembra de España demanda presencia del Gobierno español en los comités de expertos que reúnen periódicamente en Bruselas, y que toman las decisiones que más afectan.
Más exportadores que consumidores
Javier Fernández reconoce que la Junta de Castilla y León ha intentado siempre ayudar al sector, teniendo en cuenta que la producción de patata es una pieza clave en la agricultura regional. Sin embargo, las medidas autonómicas resuelven poco el problema general que existe en España, insiste. Tampoco lo hacen decisiones como la marca de garantía ‘Tierra de Sabor’, que da a conocer el producto autóctono, pero no soluciona la caída de la demanda en el mercado nacional. Y es que Castilla y León exporta mucha más patata de la que produce, así que los problemas se encuentran en la venta al por mayor.
La Asociación de Productores de Patata de Siembra de España se creó en Burgos en 2013. Está compuesta por 15 socios (cooperativas, empresas y autónomos), que representan a más de 200 agricultores implantados en más de 150 localidades de Burgos, Palencia, Álava y Navarra. Aglutina el 85 por ciento de la superficie destinada en nuestro país a la patata de siembra. Anualmente sus socios producen más de 35.000 Tm. de semilla certificada de patata en alrededor de 2.150 Ha. manteniendo así más de 100 empleos directos.