Silvia Álvarez se abstiene por “honradez y decencia”
La número tres de Ciudadanos ha sido la única que se ha abstenido en la elección del alcalde
Álvarez de Eulate defiende que sólo ella ha defendido “los intereses, los estatutos y los principios” del partido
La concejala asegura que ayer la amenazaron con la expulsión del partido y ahora Ciudadanos pondrá en marcha la salida de Silvia Álvarez que no renunciará a su acta
Silvia Álvarez de Eulate jura su cargo como concejala del Ayuntamiento de Burgos. IAC
La décima legislatura del Ayuntamiento de Burgos comienza con un conflicto interno en el seno de Ciudadanos y con Silvia Álvarez de Eulate absteniéndose en la elección del alcalde, mientras sus otros tres compañeros de partido han votado a Gloria Bañares para dirigir el Consistorio. La concejala defiende que su abstención obedece a un ejercicio de “honradez y decencia”, después de que el pasado jueves Ciudadanos decidiese tirar por la calle de en medio y votarse a sí mismos en la elección de alcalde.
Silvia Álvarez de Eulate cree que esa decisión ya ha pasado factura a su partido, después de lo que entiende ha sido un “engaño y un paripé de negociaciones con el resto de fuerzas políticas”. La concejala asegura sentirse “espíritu Ciudadano” y haber sido la única que “siempre ha defendido los intereses, los estatutos y los principios del partido”.
Su pertenencia a Ciudadanos podría tener las horas contadas tras no seguir la decisión tomada por la junta directiva y el resto de los compañeros electos, así como del coordinador regional, que además, según ha explicado posteriormente Gloria Bañeres, portavoz de Ciudadanos, “contaba con el beneplácito de Barcelona”. Sin embargo, Álvarez de Eulate espera que el partido la apoye, pero es consciente de que el ambiente con el resto de los compañeros está contaminado por esta decisión.
Bañares ya se vé con tres concejales en Ciudadanos
Aunque aún Silvia Álvarez de Eulate pertenece a el partido naranja, Gloria Bañeres entiende que el partido tomará medidas a la abstención de su número tres, después de que el pasado jueves, explica, tres de los cuatro concejales, la junta directiva y el delegado territorial de Ciudadanos en Castilla y León tomasen la decisión de votarse a sí mismos, con el consentimiento de Barcelona.
Gloria Bañeres conversa con Jesús Ortego antes del inicio del Pleno. IAC
Esta vía que sorprendió a muchos, asegura Bañeres, estuvo “desde el principio” y Silvia Álvarez la conocía. La cabeza de lista de la formación naranja asegura que no era una estratega para ser alcaldesa, sino “la última opción que quedaba después de que no se consiguiese, por un lado el compromiso de regeneración democrática (con el PP), y por el otro sólo se viese un revanchismo político (PSOE e Imagina Burgos)”.
Gloria Bañeres no quería que la izquierda les “imputase” el nombramiento de Javier Lacalle como alcalde y han optado por el “simbolismo político” de votar su propia candidatura, a sabiendas de que ni PSOE ni Imagina la respaldarían.