El Ayuntamiento podría tener que modificar el PGOU para garantizar Campofrío
El PSOE denuncia que el Plan General exige un número mínimo de plazas de carga y descarga “desorbitado” para la nueva planta
Fernández Santos asegura que el problema también afecta a Varta, y afectará a cualquier otra empresa que apueste por Burgos
Plantea la necesidad de modificar el PGOU y, hasta entonces, desbloquear los proyectos con una declaración de excepcionalidad
Licencias trabaja ya sobre el tema, estudiado si la declaración sería suficiente o se requiere realmente de una modificación
El Plan General de Ordenación Urbana, aprobado el pasado año, marca unos requisitos “muy rígidos” en cuando a plazas mínimas de carga y descarga para nuevos proyectos empresariales o ampliaciones de los existentes. En concreto, las industrias con más de 1.000 metros cuadrados de desarrollo deberán disponer de una plaza extra por cada 500 metros cuadrados de construcción, lo que en la práctica supone que la nueva Campofrío, con sus 78.000 metros cuadrados, requeriría de unas 200 plazas, es decir, tendría que destinar 8.000 metros cuadrados de su terreno en La Bureba a carga y descarga, lo que es prácticamente imposible.
Ha sido el concejal socialista Antonio Fernández Santos el que ha dado la voz de alarma ante los medios de comunicación, si bien desde el Equipo de Gobierno aseguran que Licencias está trabajando para solventar este problema y que el PSOE se ha enterado gracias a ellos. Teniendo en cuenta que es una “barbaridad” exigir a Campofrío esas 200 plazas de carga y descarga, cuando requeriría de poco más de 40, ha asegurado Fernández Santos, la única solución que se plantea es la modificación puntual del PGOU, a fin de modificar este exigencia de manera definitiva.
La modificación del PGOU llevará 6 meses, de ahí que la solución inmediata pase por las declaraciones de excepcionalidad
Sería modificar los artículos 33, 45 y 48 para que el número de plazas a requerir fuese equivalente a las necesidades reales de las empresas, ha insistido el socialista. Pero teniendo en cuenta que una modificación del PGOU llevaría, como mínimo seis meses de tratamitación, lo que tienen que hacer ahora el Ayuntamiento es plantear una declaración de excepcionalidad que permita conceder las licencias correspondientes a Campofrío para iniciar los trabajos de construcción de la nueva planta en La Bureba. Fernández Santos pide que se convoque cuanto antes un Pleno, para formalizar la declaración.
Estudiando la solución
Desde el Equipo de Gobierno aseguran que están trabajando en ello, a través del área de Licencias, que es donde se ha detectado el problema. Sin embargo aún no tienen decidido si podría servir únicamente una declaración de excepcionalidad o se requeriría es modificación del PGOU. Lo que sí tienen claro es que, con independencia de la decisión final, van a tramitar esa declaración de excepcionalidad de manera inmediata, puesto que aún hay tiempo antes de que se disuelva la Corporación Municipal como consecuencia de las elecciones del 24 de mayo.
Para Antonio Fernández Santos la modificación del Plan General es obligatoria, puesto que los requisitos no afectan exclusivamente a Campofrío. Cualquier nueva empresa que apueste por asentarse en Burgos, e incluso las ampliaciones de las ya existentes, tendrán que cumplir esas exigencias “desorbitadas”. De hecho, Varta lleva tiempo esperando a que se resuelvan tres expedientes, dos por finalización de obras y un tercero por ampliación de instalaciones, que permanecen bloqueados en Licencias precisamente porque incumple esos artículos del PGOU, ha explicado el concejal.