Un incendio en un garaje de Severo Ochoa calcina una moto y un turismo
Efectivos del Parque de Bomberos de Burgos ocuparon casi dos horas y media de trabajo en sofocar las llamas
El fuego afectó también a los sistemas eléctricos y canalizaciones del edificio, pero no fue necesaria su evacuación
Los Bomberos aseguran que no parece que haya relación con el suceso de San Bruno, aunque ambos los investiga Policía Judicial
La verdad es que cuesta no buscar un punto de conexión entre el incendio que afectó en la madrugada del viernes a un garaje comunitario de la Plaza San Bruno y el fuego que se desencadenó esta pasada noche en otro garaje, en este caso ubicado en la calle Severo Ochoa. Sin embargo, no existe relación alguna entre ambos incidentes, aseguran desde el Parque de Bomberos de Burgos, al mismo tiempo que reconocen que es lógico que los ciudadanos, y los periodistas, nos preocupemos y pensemos que algo raro hay detrás de dos sucesos de similares características ocurridos con apenas cuarenta y ocho horas de diferencia.
A las 2:04 de anoche, los Bomberos recibían un aviso ante la presencia de humo que se filtraba por las rejillas de un garaje subterráneo en Severo Ochoa. Hasta el lugar se desplazaba una dotación del Cuerpo y, tras comprobar el alcance real del incendio, se decidió movilizar a todos los efectivos de servicio en turno. Un total de 16 profesionales distribuidos en dos vehículos autobomba, una autoescala y un vehículo auxiliar. Todos ellos estuvieron trabajando en el lugar durante casi dos horas y media, hasta que a las 4:30 se dio por extinguido el fuego.
Se movilizaron 16 efectivos con dos autobombas, una autoescala y un vehículo auxilar
Las llamas calcinaban una moto y un turismo aparcados en el interior del garaje, ocasionando también daños a las instalaciones del edifico de viviendas, en concreto a los sistemas eléctricos y a las bajantes de agua. No se tuvo que desalojar el bloque, puesto que a diferencia de lo ocurrido en San Bruno ni el fuego ni el humo afectaban directamente a las viviendas. Por lo tanto, este incendio en Severo Ochoa se ha quedado en un susto o, visto desde la perspectiva de los Bomberos, en una intervención más de las muchas que realizan a lo largo de todo un año de servicio.
Nada extraordinario
Y es que “hay cosas que ocurren de forma habitual”, aseguran desde el Parque de Burgos, y si bien es cierto que hacía mucho tiempo que no se daban fuegos en el interior de un garaje, tampoco se puede considera una situación extraordinaria. Los profesionales de extinción de incendios recuerdan que la mayor parte de los fuegos que afectan a un vehículo se generan en un sobrecalentamiento del motor o, incluso, en un fallo de tipo eléctrico. Llegas con tu coche, lo aparcas en la plaza, el motor queda caliente y si existe un fallo mecánico o eléctrico, o una fuga de combustible, ya está preparada la fiesta.
Los Bomberos, salvo que los indicios sean bien claros, no contemplan en primer lugar que un fuego en un vehículo sea intencionado, aunque también existen. Son los efectivos de Policía Judicial los que deben determinar, si es que pueden, cuáles han sido las causas del suceso, como lo están haciendo tanto el de San Bruno como el de Severo Ochoa. Desde el Parque de Burgos, y por su experiencia, sólo dicen que “no hay relación” alguna entre ambos incidentes, “salvo informe superior que diga lo contrario”, insisten. Así que sí es “curiosa” la coincidencia de casos pero, aparentemente, es solo eso, una coincidencia.