Secretaría General ratifica la disolución del grupo municipal de UPyD
Un informe jurídico rechaza el recurso interpuesto por Pérez contra el decreto de Alcaldía que disolvía el grupo municipal
El secretario general alega que las renuncias de Altable y Alonso tuvieron efectos inmediatos, sin necesidad de llegar a pleno
Alonso ya no forma parte de la Corporación, Altable es concejal no adscrito y Pérez se integra en el Grupo Mixto
Altable ya ha intervenido como concejal no adscrito. GIT
Tal y como estaba previsto, el pleno ordinario celebrado esta mañana en el Ayuntamiento de Burgos ha hecho efectiva la renuncia de Roberto Alonso a su acta de concejal, al mismo tiempo que ha conocido oficialmente la decisión de Julián Altable de pasar a ser concejal no adscrito y, como consecuencia, la disolución del grupo municipal de UPyD. El recurso potestativo de reposición presentado por la formación magenta contra esta última decisión, alegando que incumplía con directrices del Tribuna Constitucional y del propio Reglamento Orgánico del Ayuntamiento, ha sido desestimado por Secretaría General.
Rosario Pérez, como única representante de UPyD en el Consistorio, aseguraba que el acto mediante el cual el alcalde decretó la desaparición del grupo municipal fue “nulo”, puesto que se realizó antes del pleno en el que, de manera oficial, se iba a conocer la renuncia de Alonso y la salida de Altable. De acuerdo con el recurso, la renuncia de ambos corporativos no se era efectiva hasta que no pasase por pleno, dado que hasta ese momento era revocable. De ahí que, según UPyD, el grupo debería haber estado formalmente constituido hasta esta jornada del viernes, puesto que continuaba formalmente con tres miembros.
Efectos inmediatos
El informe asegura que las renuncias tienen efectos jurídicos inmediatos, sin necesidad de llegar a pleno
Para defender esta postura, la formación se ampara tanto en el Reglamento del Ayuntamiento como en doctrina del Tribunal Constitucional. Sin embargo, Secretaría General hace uso de los mismos instrumentos para desestimar el recurso. Y es que, según el informe emitido, en el momento en que Altable y Alonso registraron sendas renuncias a formar parte de UPyD, solicitando ser considerados como concejales no adscritos, su salida del grupo municipal se hace efectiva, puesto que se trata de un acto “libre, plenamente voluntario y formalmente realizado”.
Nada afecta a esta situación la posterior decisión de Alonso de devolver su acta de concejal, puesto que los efectos jurídicos de las renuncias son de carácter inmediato. Ni el hecho de que sean revocables hasta el último momento, como recordaba la formación, insistiendo en que, de haber cambiado de opinión uno de los dos, el partido habría pasado por una situación perjudicial, la de quedarse durante algunos días sin grupo municipal, teniendo que compartir tiempo y espacio con el Grupo Mixto. Por ello, el decreto emitido por el alcalde el 2 de marzo es perfectamente legal y se ajusta a derecho, confirma Secretaría General.
A la espera de Díez
Así las cosas, Roberto Alonso ya no forma parte oficialmente de la Corporación Municipal, después del pleno ordinario celebrado esta mañana. Julián Altable ya ha actuado como concejal no adscrito, y conservará su participación en la comisión de Licencias y en los consejos de Aguas, el IMC y Deportes. Y Rosario Pérez comparte con Raúl Salinero Grupo Mixto, y ya se han repartido las representaciones, a través de un acuerdo entre IU y UPyD, que se ha conocido también en el pleno. Ahora toca esperar a que la Junta Electoral Central autorice la entrada de Mario Díez para ocupar el puesto liberado por Roberto Alonso.