La Fundación Caja de Burgos se rinde ante el arte africano

La sala de exposiciones del Cultural Cordón acoge hasta el 10 de mayo la muestra ‘África. Mito y creación’ una exposición de 350 piezas de José Luis Blanco

Se trata de una de las exposiciones más ambiciosas de las desarrolladas por la Fundación Caja de Burgos en el Cultural Cordón

La Fundación Caja de Burgos se rinde ante el arte africano La muestra se ha inaugurado hoy. BC

La sala de exposiciones de la Casa del Cordón acoge desde hoy y hasta el próximo 10 de mayo la muestra ‘África. Mito y creación’, una exposición compuesta por más de 350 obras de arte africano procedentes de la Colección José Luis Blanco, entre las que se encuentran máscaras de madera, bronce y terracota, estatuaria, armas, utensilios, brazaletes, accesorios personales, emblemas de autoridad o instrumentos musicales.

Las obras expuestas proceden del África subsahariana, preferentemente de su área central, en torno a los actuales estados de Costa de Marfil, Ghana, Camerún, Gabón, Congo, República Democrática del Congo o Chad, y protagonizadas por las culturas akan, senufo, lobi, baulé, yoruba, fang, kwele, punu, kota, songye, luba, sao y sokoto entre otras.

La selección de piezas se ha articulado bajo el propósito de brindar una lectura adecuada, limpia y libre de prejuicios, que sitúe la verdadera importancia del arte africano en la historia de la cultura. La calidad y originalidad de las obras seleccionadas, el potente magnetismo que irradian y la capacidad de seducción y de reflexión que procuran convertirán sin duda a esta muestra en una de las más sugerentes de cuantas ha celebrado Cultural Cordón en los últimos tiempos.

El recorrido propuesto en la exposición, una producción única y exclusiva de Fundación Caja de Burgos, parte de la visión del arte africano desde la perspectiva occidental, intentando desmontar algunos de los errores más frecuentemente mantenidos a lo largo del tiempo.

En ese sentido, la muestra pretende trazar la dimensión genuina de una cultura compleja y rica que, impropiamente calificada de primitiva, se ha visto sometida a una visión reduccionista que olvidaba lo fundamental: la apariencia física de las máscaras y esculturas africanas son un mero soporte tridimensional, un contenedor estético que es habitado por las fuerzas de la naturaleza. En palabras del coleccionista y africanista José Luis Blanco, “en África es lo divino o lo espiritual lo que engendra el arte”. El artista cuando crea una forma no lo hace pensando en su mayor o menor lucimiento estético, sino en su virtud como morada para el alma.

La exposición aborda los comienzos históricos y el posterior desarrollo de las primeras civilizaciones africanas, se detiene en su singularidad espiritual, religiosa y conceptual como un arte que, por encima de la forma, defiende la idea y concluye, finalmente, con las creaciones utilitarias vinculadas a la estética del poder, la apariencia y la belleza.