0-0. Un punto y poco más

El Burgos firma un mal partido frente al Sporting, pero mantiene su portería a cero y suma un valioso empate que le permite mantener la distancia con el descenso

Los de Arconada fueron inferiores al rival, que pecó de falta de puntería

Debutaron los recién llegados Llorente y Raúl Rodrigo

El Burgos CF rescató hoy un valioso punto en su visita a Mareo tras aguantar al Sporting B durante buena parte del partido y dejar el marcador a cero. Sin duda, el empate no es el mejor de los resultados posibles, sobre todo teniendo en cuenta la necesidad imperiosa de puntos con la que afrontaba la jornada el Burgos, pero visto lo visto en las instalaciones de Mareo, es necesario poner en valor la igualada, que permite al conjunto burgalés mantener la distancia con la zona de descenso.

Ficha Técnica

0 – Sporting B: Dennis; Menéndez, Meré, Guitián, Alberto; Mendi, Guille, Traoré, Tato; Álex García (Jaime Santos, min.78), Viesca (Juan Mera, min.60).

0 – Burgos CF: Aurreko; Maureta, Quesada, Manu Torres, Sergio Esteban (Raúl Rodrigo, min.87); Gabri, Moke; Gabri Gómez, Jorge Sáez (Dani Guillén, min.81), Carralero (Llorente, min.71); Cristian.

Goles: Sin goles.

Árbitro: Soto Grado (Colegio Riojano). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Mendi, Menéndez y Guitian y a los visitantes Quesada.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo tercera jornada del Grupo I de la Segunda División B disputado en las instalaciones de Mareo ante unos 700 espectadores.

Empezó bien plantado el Burgos, con varias novedades en el once. Las ausencias por sanción de Andrés y Beñat abrieron la puerta a la titularidad de Sergio Esteban en el lateral izquierdo y de Gabri en el centro del campo. Pero la revolución no acabó ahí. Arconada colocó a Maureta en el lateral derecho y Manu Torres acompañó a Quesada en el centro de la zaga, dejando a Moke como contención en el medio centro.

Con ese novedoso dibujo y una apuesta muy vertical, el conjunto blanquinegro tardó poco en acercarse a las proximidades del área local. Aún no se había cumplido el primer minuto de partido cuando Cristian pudo abrir el marcador. El delantero recibía a la espalda de los centrales, regateaba a Dennis y, casi sin ángulo, disparaba a puerta vacía, pero un defensa sacó el balón de la misma línea. Cinco minutos después lo intentaba Carralero con un disparo tras jugada colectiva que acabó en las manos del cancerbero asturiano.

El Burgos había arrancado con un punto más de intensidad, pero el Sporting no tardó en desquitarse la presión y empezó a dominar el juego en todas las líneas, aprovechando las inseguridades de Sergio Esteban para generar peligro una y otra vez por la banda derecha. En ese escenario, la velocidad de Guille y Mendi fue un auténtico quebradero de cabeza para los de Arconada. Hasta cinco ocasiones claras tuvieron los delanteros del Sporting B para abrir el marcador, pero la falta de puntería les privó de encarrilar el choque en la primera parte.

No fue hasta los minutos finales cuando el Burgos consiguió echar el cerrojo a la banda de Sergio Esteban y recuperó parte de la intensidad que había impreso a su juego en los compases iniciales pero ni Jorge Sáez ni Quesada encontraron el premio a sus internadas y el Sporting aún tuvo la ocasión de ponerse por delante en el 44 con otra gran ocasión de Mendi.

Mejor el Sporting

Tras el paso por vestuarios, y con la sensación de haber aguantado los envites del Sporting, el Burgos saltó al campo con la clara intención de hacerse con el control del partido, pero los rojiblancos seguían estando mejor plantados. En el 52, y tras varios minutos de ida y vuelta, los locales pudieron abrir de nuevo el marcador en una jugada loca que acabó con el balón muerto dentro del área, pero que nadie acertó a rematar. La respuesta del Burgos llegó a través de las botas de Carralero y, sobre todo, Gabri Gómez, que en el 56 probó fortuna con un gran disparo cruzado que se marchó fuera por poco.

Pero sin duda, la ocasión más clara de la segunda parte volvió a ser para el Sporting. En el 65, Mendi se zafaba de su par y enganchaba un fantástico remate de cabeza que era repelido en primera instancia por Aurreko. El rechace le volvía a caer al delantero rojiblanco y el cancerbero volvía a responder desde el suelo. Paradón.

A medida que pasaban los minutos y con los recién llegados Llorente y Raúl Rodrigo sobre el césped, el Burgos pareció conformarse con el empate, cerrando bien sus filas e intentando sorprender tímidamente al contraataque. Así, y a pesar de algún acercamiento asilado de los hombres de Arconada, el peso del partido acabó cayendo totalmente sobre los hombros del Sporting, que firmó otras dos ocasiones claras de gol, pero cuya falta de puntería le privó de una victoria que quizá habían merecido.

Al final, un empate que deja sobre la mesa todavía muchas dudas, pero que permite al Burgos seguir vivo en una pelea por evitar el descenso que tiene visos de ser muy larga. El fin de semana que viene, los de Arconada recibirán la visita del Real Avilés.