0-2. El Mirandés naufraga en Anduva
El CD Mirandés cayó derrotado frente al Racing en un partido condicionado de principio a fin por la nieve y las inundaciones que han asolado Miranda
El árbitro decidió no suspender el choque una hora antes de su inicio
Un gran manto de nieve cubrió Anduva y el Racing supo leer mejor el partido
El terreno de juego estaba impracticable. LFP
Intensidad, garra, lucha e incluso pundonor, pero poco fútbol. Y además sin un resultado a favor. El Racing ha roto esta noche el idilio de Anduva al superar al Mirandés en un partido tan complicado como extraño por las adversidades meteorológicas que han azotado a Miranda durante toda la jornada. De hecho, la celebración del partido ha estado en tela de juicio durante todo el día debido a la crecida del Ebro, que ha anegado todos los alrededores de Anduva. Finalmente, una hora antes del choque, el árbitro ha estimado que se podía jugar, incluso a pesar de la intensa nevada que ha comenzado a caer a primera hora de la tarde.
Ficha Técnica 0 – CD Mirandés: Imanol; Aitor, Caneda, Corral, Kijera; Rúper; Jordi Pablo (Juanjo, min.46), Igor Martínez (Provencio, min.68), Emilio (Barahona, min.68), Álex García; Urko Vera. 2 – Racing de Santander: Mario; Orfila (Borja, min.58), Bernardo, Juanpe, Saúl; Fede, Javi Soria, Miguélez (Borja Granero, min.46), Koné (Iván Moreno); Iñaki, Mariano Goles: 0-1, min.62: Koné; 0-2, min.89: Mariano. Árbitro: Sagues Oscoz (Colegio Vasco). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores visitantes Mariano y Fede. Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo tercera jornada de la Liga Adelante disputado en Anduva ante unos 3.800 espectadores, incluidos unos 600 aficionados del Racing. Los árbitros sopesaron la posibilidad de suspender el partido ante las inundaciones que han asolado Miranda a lo largo de la jornada. Además, la nieve fue la protagonista durante todo el choque En un escenario como el que presentaba el estadio, se antojaba un partido físico, muy alejado de la imagen que se espera de un choque de Segunda División. Así lo han comprendido los jugadores de ambos equipos, que desde el primer minuto se han visto obligados a buscar el pelotazo, ya que el balón, literalmente, no corría por el césped, cubierto por un gran manto blanco. Sin embargo, el Racing pareció leer mejor la situación y amoldarse a las condiciones del partido, disfrutando de hasta tres ocasiones muy claras en el primer minuto. Afortunadamente para el equipo rojillo, Imanol consiguió sacar los remates de Koné, Miguélez y Mariano. La salida en tromba del conjunto cántabro pilló al Mirandés a pie cambiado y los de Terrazas tardaron varios minutos en entrar en el partido. No fue hasta el minuto 12 cuando los rojillos firmaron su primera gran ocasión con un remate de Urko Vera en boca de gol que desvió un defensa a saque de esquina cuando la grada ya cantaba gol. A partir de ahí, el Racing puso el ritmo, que no el control, y disfrutó de varias ocasiones más para abrir el marcador, pero Koné, el más activo del equipo cántabro, no acertó a resolver. Tras el paso por vestuarios, el Mirandés saltó al campo con un punto más de intensidad y en los primeros minutos asedió la portería defendida por Mario, aunque sin fortuna. Caneda, Juanjo, Emilio y otra vez Urko Vera lo intentaron con mayor o menor puntería y siempre con balones aéreos, pero el Racing se desquitó pronto de la presión rojilla. En el minuto 62, Koné recibía dentro del área un gran pase de Mariano, se daba la vuelta aprovechando el despiste de Corral y batía por bajo a Imanol. El gol cayó como un jarro de agua fría sobre la parroquia local, que veía cómo el partido se ponía cuesta arriba. Máxime cuando el Racing aprovechó la situación para cerrar sus líneas y buscar la sentencia a la contra. Una sentencia que tardó en llegar gracias al concurso de Imanol, que paró un penalti a Koné en el 79 pero no pudo hacer nada para evitar el tanto de Mariano en la recta final. El delantero verdiblanco aprovechaba una buena cesión de Iñaki para rozar lo justo el balón y poner el 0-2 definitivo en el marcador. Al final, una derrota que saca al Racing de los puestos de descenso pero que supone un gran bache en la pelea del Mirandés por seguir enganchado a la zona noble de la clasificación. La semana que viene, nueva prueba de fuego en Alcorcón.Mejor arranque