El PCAS centra su política en combatir la despoblación
La provincia de Burgos ha perdido en 2014 un 1,17 por ciento de sus 371.248 habitantes, lo que supone 12 diarios
Proponen medidas que frenen la despoblación y aumenten la natalidad a base de servicios y empleo de calidad que fije ciudadanos en la comunidad
Domingo Hernández y Juan Carlos García. IAC
El Partido Castellano (PCAS) fija en la despoblación y el envejecimiento de los castellano y leoneses el gran problema que pesa sobre la comunidad. Los datos estadísticos de los últimos años no dejan lugar a dudas, Castilla y León ha perdido peso específico sobre el conjunto nacional, pasando de tener el 14 por ciento de la población española en 1900, a el 5,33 por ciento en 2014. Sin retrotraerse tanto, la provincia de Burgos perdió 15.405 habitantes en 2013 y 14.300 en 2014, lo que supone un 1,17 por ciento de la población o 12 habitantes al día.
Por otro lado, el envejecimiento de la población agrava aún más el fenómeno despoblacional y obliga, según Domingo Hernández, secretario provincial del PCAS, en los pueblos a que “se cierren escuelas y se amplíen cementerios”. Esto se refleja en datos del saldo vegetativo del primer semestre de 2014 que registró 14.532 defunciones y 8.951 nacimientos.
La tercera de las patas del fenómeno despoblacional es el de los jóvenes. Entre 2008 y 2014 se han marchado 18.000 castellanos y leoneses de entre 18 y 35 años. Los castellanistas consideran que estos malos datos son un “fracaso colectivo” y que hay que aplicar medidas basadas en la natalidad, la repoblación y el empleo de calidad.
Para conseguir mejorar los datos que acumulan una tendencia negativa, el PCAS se ha fijado una serie de medidas que serviría para paliar los que consideran los grandes males de la comunidad. En primer lugar, quieren aumentar de 16 a 18 las semanas de baja por maternidad, algo que supondría un sobrecoste de 15 millones de euros, y que para Domingo Hernández es asumible. Además, creen que es importante descentralizar las funciones de la Junta de Castilla y León para repartir “empleo de calidad” entre todas las provincias de la región.
Los castellanistas tampoco se olvidan de las posibilidades de crear una Facultad de Medicina en Burgos que estiman que podría suponer un retorno anual de 50 millones de euros sobre la inversión. También apuestan por encumbrar a Burgos en el referente mundial del estudio del castellano que permitiría alcanzar unos ingresos anuales de 125 millones de euros.
