Desarticulada una red de importación de drogas con presencia en Burgos
La Guardia Civil detiene a 47 personas en el marco de la operación ‘Koffer’, desarrollada en 11 provincias españolas
Se dedicaban a introducir drogas sintéticas desde Holanda, Marruecos y Colombia, y hachís desde Marruecos
Los agentes han intervenido 1.600 kilos de hachís, 20 kilos de speed, 10 kilos de heroína, 2 kilos de cocaína y 1 de marihuana
La Guardia Civil, en el marco de la operación ‘Koffer’, desarrollada en la provincia de Álava, ha detenido a 47 personas y ha imputado a otras 6 (22 de nacionalidad marroquí, 16 españoles, 7 colombianos, 1 ecuatoriano y 1 portugués), que pertenecían a una organización dedicada a la importación desde el extranjero de sustancias estupefacientes para su posterior distribución por todo el territorio nacional. Se les imputa los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. La operación ha incluido detenciones en diferentes provincias españolas, entre las que se encuentra Burgos.
Los agentes han realizado 12 registros domiciliarios, en los que han intervenido 1.600 kilos de hachís, 20,5 kilos de speed, 10 kilos de heroína, 2,1 kilos de cocaína, 1 kilo de marihuana, así como 4 vehículos de alta gama y 110.700 euros en metálico. La operación se inició cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la existencia de una red que podría estar introduciendo distintos tipos de droga, desde países como Holanda, Marruecos y Colombia para distribuirla por todo el territorio nacional, lo que motivó el establecimiento de un dispositivo de seguimiento.
Dos ramificaciones
Una vez identificados y localizados los integrantes de la red se procedió a su detención la en las provincias de Álava, Vizcaya, Guipúzcoa, Navarra, Burgos, Ávila, Segovia, Madrid, Pontevedra, Málaga, Cádiz y Marruecos. La organización estaba totalmente jerarquizada y abarcaba dos ramas principales de entrada y distribución de droga, según el tipo de sustancia. Cada miembro tenía establecida una función dentro de la red y para llevarla a cabo adoptaba grandes medidas de seguridad con el fin de dificultar su localización.
Una de las ramificaciones de la trama se encargaba de la introducción de droga (principalmente sintéticas) que importaban desde Holanda, Marruecos y Colombia. La otra se dedicaba a importar casi en exclusividad hachís desde Marruecos. Después se distribuía en todo el territorio nacional. Entre las diferentes intervenciones de droga que se han llevado a cabo destacan los 725 kilos de hachís que se incautaron en Málaga en dos actuaciones diferentes cuando la transportaban en vehículos. Durante una de estas actuaciones, tanto el vehículo oficial como el de otros usuarios de la vía fueron embestidos por los miembros de la red que circulaban en un coche de gran cilindrada.