Salinero pide a Escribano y Alonso que expliquen su labor en Caja de Burgos
El portavoz de IU recuerda que ambos estaban en los órganos de control cuando se concedieron las operaciones ventajosas a Arribas
No han asumido responsabilidades, pero ahora “se llevan las manos a la cabeza” cuando comprueban el desmantelamiento de la caja
Raúl Salinero ha pedido a Luis Escribano y a Roberto Alonso “que den explicaciones” sobre el papel que jugaron en los órganos de control de la extinta Caja de Burgos, uno en representación del Grupo Municipal Socialista y el otro como presidente de FAE (cargo que ocupó antes de ser el portavoz de UPyD en el Ayuntamiento). La petición llega tras conocerse la imputación al que fuera presidente de la caja, José María Arribas, tras una denuncia presentada por UPyD, y por la que tendrá que declarar previsiblemente el próximo 15 de enero.
El juez quiere investigar las condiciones “ventajosas” en las que se concedieron hasta 45 operaciones de crédito a empresas y sociedades vinculadas con Arribas, por valor de 34 millones de euros. Y Raúl Salinero quiere saber por qué nadie hizo nada en el seno de la caja para impedir este trato de favor, ni siquiera personas como Escribano o Alonso que estaban precisamente allí para controlar la gestión. “En ningún momento han dado explicaciones de por qué permitieron hacer esas operaciones de crédito y el desmantelamiento de la caja, de la herencia construida por los burgaleses”.
Que justifiquen su sueldo
“Den explicaciones, justifiquen su sueldo, de por qué se la coló Arribas”
“Sólo se hacen pequeñas críticas por encima, en lugar de asumir responsabilidades”, insiste Salinero, al mismo tiempo que les pide que “justifiquen su sueldo”. Cobraban 12.000 euros anuales pero no cumplía con su laboral de control, según el representante de Izquierda Unida. Ahora “se llevan las manos a la cabeza” al ver convertida la caja en una fundación bancaria y desmantelada la obra social, o cuando se eligen a los nuevos patronos entre personas vinculadas al Partido Popular, insiste, pero en su momento no hicieron nada para evitar esta situación.
Salinero ha vuelto a criticar el desmantelamiento de la Fundación Caja de Burgos por parte del Partido Popular, que la utiliza como una “herramienta política”. Los fondos de la entidad sirven para “salvar la papeleta” a la formación, cuando el Ayuntamiento no dispone de los recursos necesarios para llevar a cabo sus proyectos. El último ejemplo es la posible aportación de 850.000 euros que realizará a la remodelación de la Plaza de Toros, entre 2015 y 2016, para la instalación de la climatización. El Partido Popular está “dilapidando” el dinero que la Fundación reserva para fines culturales, asegura el portavoz de IU.