Los vecinos siguen apostando por vaciar la N-I

La Plataforma de Afectados da la bienvenida al remodelado tramo entre la variante de Monasterio e Rodilla y Cubo de Bureba

Insisten en que el problema no es sólo el mal estado de la vía o los cruces peligrosos, sino los 4.000 camiones que circulan a diario

Rafael Solaguren asegura que la solución definitiva pasa por derivar tráfico a la autopista, con peajes blandos y/o liberalizándola

Los vecinos siguen apostando por vaciar la N-I La N-I es una de las carreteras que más tráfico soporta. PCR

Cualquier actuación que mejore la circulación por la N-I es bienvenida, incluso aunque presente destacadas deficiencias y carencias nada más ser inaugurada. Sin embargo, desde la Plataforma de Vecinos Afectados siguen insistiendo en que la solución definitiva al problema pasa por la liberalización de la AP-1, a ser posible antes de que se cumpla el plazo legal de 30 de noviembre de 2018. Y es que, no estamos hablando sólo de una carretera en mal estado, de cruces a nivel y de señalización incorrecta, sino de una vía por la que circulan diariamente unos 8.000 vehículos, de los que 4.000 son pesados.

El presidente del colectivo, Rafael Solaguren, reconoce que “estamos contentos” por las obras recién inauguradas, los trabajos de acondicionamiento entre la Variante de Monasterio de Rodilla y Cubo de Bureba. Eso sí, recuerda que llevaban desde el 2005 esperando a que las obras se ejecutasen y que aún quedan pendientes cuatro tramos. El proyecto, con una inversión de 46,1 millones de euros, ha mejorado el firme en un tramo de 30 kilómetros, ha eliminado los cruces más peligrosos creando pasos en altura y se ha mejorado señalización y medidas de seguridad.

Deficiencias

Concentración en recuerdo de Verónica, víctima de la N-I. PCR

Concentración en recuerdo de Verónica, víctima de la N-I. PCR

A pesar de las “bondades” de la intervención, Solaguren recuerda que ni las obras se señalizaron correctamente, ni luego se han ejecutado de la manera adecuada. Además, los alcaldes de los municipios afectados ya han denunciado varias deficiencias: en algunos accesos la vía no tiene la anchura suficiente para el giro de camiones y tractores. Además, algunos caminos han quedado cortados, sin acceso a maquinaria agrícola, y entre Prádanos de Bureba y  Castil de Peones se cuenta con dos vías de servicio, una a cada lado de la carretera, casi tan anchas como la propia carretera, y con dos carriles.

Ahora le toca a los alcaldes de los municipios protestar, recuerda el presidente de la Plataforma, porque movilizándose parece que se consiguen cosas. De todos modos, Rafael Solaguren sigue insistiendo en que la solución definitiva pasa por sacar los vehículos de la N-I. Son alrededor de 8.000 a diario, de los que 4.000 son pesados, y por mucho que se mejore y acondicione la vía, es imposible circular con seguridad con este volumen de tráfico. Por eso, desde el colectivo vecinal siguen pidiendo medidas que fomente la derivación de vehículos a la autopista.

Vaciar la N-I

Quieren hechos, y no palabras. Y es que ya en verano se habló de un peaje blando, con un 50 por ciento de descuento, para camiones, y todavía no se ha puesto en marcha. Así que los vecinos desconfían, y temen que muchas de las promesas que se realizan en estos meses estén vinculadas a las próximas citas electorales. Rafael Solaguren insiste en que más le valdría al Gobierno haber invertido esos 46 millones en otro tipo de acciones, conducentes a sacar el tráfico de la nacional, en lugar de construir puentes e infraestructuras que, si todo va bien, dejarán de ser necesarias en tres años.

Desconfían también del acuerdo unánime en el Congreso de los Diputados de no prorrogar la concesión de la AP-I más allá de 2018. A Solaguren le parece “triste” que para asegurar algo que viene recogido en el BOE se tenga que aprobar una Proposición No de Ley. Así las cosas, la apuesta de la Plataforma de Vecinos Afectados por la N-I sigue siendo la liberalización de la autopista cuanto antes. Que se vaya pensando cómo cumplir con ese trámite y, sobre todo, qué actuaciones de adaptación hay que llevar a cabo en la vía de alta capacidad: ampliación a un tercer carril, más accesos para los municipios del entorno… Ellos seguirán muy vigilantes a los accidentes que se puedan producir y continuarán con sus movilizaciones.