Compromiso para cerrar Garoña si se gobierna
Todos los grupos parlamentarios, excepto PP, UPyD y CIU, firman una declaración conjunta por el desmantelamiento de la nuclear
Luis Tudanca recuerda que la central lleva dos años cerrada y no ha afectado al suministro energético del país
Las formaciones políticas critican que el Gobierno aproveche Garoña para alargar la vida útil de las centrales hasta los 60 años
Los grupos políticos con representación en el Congreso de los Diputados, salvo Partido Popular, UPyD y CIU, han firmado una declaración por la que se comprometen, en caso de llegar al poder en la próxima Legislatura, a cerrar la Central Nuclear de Santa María de Garoña. Impulsada por el Grupo Parlamentario del PSOE, y defendida por Luis Tudanca (hasta ahora diputado por la provincia de Burgos y secretario general del PSOE de Castilla y León), la declaración es “un buen acuerdo que nos compromete a todos”, y que se sirve de la instalación burgalesa para plantear el futuro energético del país.
El Gobierno Central, “rompiendo el consenso de prórroga de las centrales nucleares por 10 años”, está dispuesto a autorizar la reapertura de Garoña por 17 años más, tal y como han solicitado desde Nuclenor. A juicio de Tudanca, el Partido Popular está utilizando el caso de la instalación burgalesa para extender la vida útil de las centrales nucleares más allá de los 40 años, llegando en este caso hasta los 60. El acuerdo alcanzando esta mañana en el Congreso garantizaría no sólo la no reapertura de Garoña o su cierre, sino también el cierre progresivo del resto de nucleares españolas.
“Innecesaria”
“Garoña lleva dos años cerrada y no ha supuesto ningún hándicap para el abastecimiento energético del país”
La gran mayoría de los grupos parlamentarios, ha insistido el socialista, entienden que el modelo energético del país debe decidirse por consenso, no ser una “decisión unilateral” del partido en el Gobierno. Un futuro que “debe caminar hacia un modelo de transición energética”, en el que se sustituya la energía nuclear por las renovables, comenzando por no autorizar la reapuerta de Garoña y decretar su cierre definitivo. Además, Luis Tudanca ha recordado que la central burgalesa lleva dos años parada y que “no ha supuesto ningún hándicap para el abastecimiento energético del país”.
Del mismo modo, los firmantes de la declaración (PSOE, PNV, Compromís, Coalición Cánaria, Equo, Geroa Bai, BNG, Amaiur e Izquierda Plural) consideran que el cierre progresivo de las nucleares debe ir de la mano de medidas que garanticen un desarrollo económico y de creación de empleo alternativo en las zonas de influencia de las centrales. Un plan alternativo que gire “alrededor de alternativas productivas, sostenibles, limpias y seguras, incrementando la competitividad de la economía local”, como el olvidado Plan Garoña, del PSOE, que el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha eliminado, ha recordado Tudanca.