La plantilla de la Fábrica de la Moneda convoca nuevos paros
El Comité de Empresa convoca paros y concentraciones en Burgos, entre 13:30 y 14:30, para mañana y el jueves 18
Las fechas coinciden con la aprobación del memorándum para su conversión en sociedad mercantil y de los PGE en el Congreso
Los sindicatos aseguran que la decisión gubernamental pone en riesgo el futuro de los centros de Burgos y Madrid
El último paro afectó a dos de los turnos de trabajo. GIT
El Comité de Empresa de la Fábrica de la Moneda vuelve a convocar un paro de hora, con concentración a las puertas de la planta burgalesa, para protestar contra el proceso de segregación, que convertiría a la actual Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT) en una sociedad mercantil. La convocatoria, que se desarrollará entre las 13:30 y las 14:30 de mañana lunes, coincidiendo con la última hora del turno de mañana y la primera del de tarde, se volverá a repetir el jueves 18. Ambas fechas son claves para el futuro de la FNMT y, por consiguiente, de la instalación de Burgos.
En primer lugar, está previsto que el Consejo de Administración apruebe mañana un memorándum que serviría de guía para la creación de una sociedad mercantil pública, controlada por el Banco de España, y que se encargaría de la impresión de billetes de euro. El memorándum sólo tendría valor si, el próximo 18, se aprueba en el Congreso de los Diputados la Ley General de Presupuestos del Estado 2015. Esta “caprichosa decisión”, que se justifica desde el Gobierno Central por un imperativo de la Unión Europea, pone en riesgo el futuro laboral de las plantas de Burgos y Madrid.
Privatización
“La caprichosa decisión extirpa a Burgos de su razón de ser: aprovisionar de papel a la imprenta”
Se segrega la fabricación de papel de la impresión de billetes, según el Gobierno, para que a través de una empresa mercantil se pueda ser más competitivo en el nuevo mercado europeo. Sin embargo, desde el Comité de Empresa insisten en que la decisión “extirpa al centro de trabajo de Madrid de su actividad sustancial y seña de identidad y, al de Burgos, de su razón de ser: aprovisionar de papel a la imprenta”. Por ello exigen a la dirección del a fábrica “mayor contundencia y firmeza en la defensa de los intereses de Madrid y Burgos frente a las oscuras e interesadas pretensiones del Banco de España en contra del interés general”.
Los representantes sindicales están convencidos de que detrás de toda esta maniobra se encuentra un intento de privatizar, a medio y largo plazo, el servicio. De lo contrario, no entienden cómo es posible que se apruebe una segregación de la Fábrica Nacional de la Moneda y Timbre después de que se aprobase una inversión de 27 millones de euros para la planta burgalesa, con el objetivo de dotarla de una nueva máquina de papel. Las promesas de mantenimiento de puestos de trabajo y condiciones retributivas, desde el Gobierno Central, no convencen a la plantilla.
