La Protectora de Animales vuelve a clamar contra la perrera municipal
Denuncian el estado de abandono en el que se encuentran las instalaciones de Villafría, sin la limpieza adecuado y un trato digno a los animales
Lo volvieron a comprobar tras el incendio de Campofrío, cuando recogieron a los animales que estaban en las jaulas exteriores por miedo al humo tóxico
El colectivo pide al Ayuntamiento que les entregue la gestión de la perrera, pero SEMAT tiene contrato hasta 2017
El incendio de Campofrío ha tenido, entre sus múltiples consecuencias, la reavivación de la polémica sobre la gestión de la perrera municipal por parte del Ayuntamiento de Burgos. La Asociación Protectora de Animales han vuelvo a denunciar el estado de “abandono” en el que se encuentra la instalación de Villafría, de cuya asistencia se encarga SEMAT. En esta ocasión, la protesta viene motivada por lo que varios voluntarios se encontraron el 16 de noviembre, cuando se acercaron a la perrera para ver cómo se estaba gestionando la protección de los animales frente a la posible nube tóxica desprendida del fuego.
La Protectora dispone de informes veterinarios que amparan sus denuncias
Un perro con una pata rota y otro con el cuello en carne viva y la cola necrosada fueron los casos más llamativos de los 9 animales que sacaron de las instalaciones, 8 perros y 1 gato, pero casi todos ellos se encontraban en mal estado y/o desatendidos, según explica Sara Menor. La portavoz del colectivo asegura que sólo sacaron a los que estaban en las jaulas exteriores, dejando en la perrera a los que que se encontraban en las habitaciones interiores, puesto que se suponía que no había riesgo de intoxicación. Pero con esta simple actuación los voluntarios pudieron comprobar, una vez más, que la perrera “es un desastre”.
Falta de limpieza, animales desatendidos, escasa o nula presencia veterinaria son algunas de las denuncias que realizan desde la Asociación Protectora. De nada le valen a Sara Menor las explicaciones del Ayuntamiento, donde no sólo se niegan las acusaciones sino que se asegura que, por ejemplo, el perro que presentaba la cola ensangrentada estaba siendo correctamente tratado, siendo la sangre una consecuencia normal de las curas y los golpes que el animal se da contra las paredes. Las heridas que presentaba el animal “no se hacen en uno o dos días”, insiste Menor.
Sin atención veterinaria
En la perrera municipal no sólo faltan medios o personal, escasea también sensibilidad a juicio de la portavoz del colectivo. Son dos los profesionales derivados por SEMAT para atender las instalaciones de Villafría, y se encargan de la limpieza y de dar comida a los animales. Sara Menor critica que la limpieza se realice “a manguerazo limpio”, incluso en pleno invierno, o que la comida prácticamente se les sirva en suelo. Los areneros de los gatos están almacenados, mientras los animales hacen sus necesidades en el suelo, lo que les genera cuadros de ansiedad y estrés, teniendo en cuenta lo limpios que son los gatos.
Se sacrificaron dos animales que iban a ser recogidos por la Protectora y se alegó “un error” administrativo
Además, la Protectora denuncia falta de atención veterinaria. Muchos de los animales que acaban en sus instalaciones tienen que ser enviados inmediatamente al veterinario porque se encuentran en un estado deplorable, y cuenta con informes que así lo atestiguan. En la perrera son los propios trabajadores de SEMAT los que deciden se si avisa al veterinario y cuándo, y según Sara Menor, la situación tiene que ser muy extrema para que estos se produzca. Tampoco se les da cariño, así que cuando los animales llegan a la Protectora, en muchos casos, son esquivos y rechazan el contacto humano.
Falta de control municipal
La portavoz del colectivo asegura que falta control por parte del Ayuntamiento de Burgos, y coordinación entre los diferentes servicios municipal. De hecho, en el mes de noviembre se sacrificaron dos animales a pesar de que la Protectora había avisado por escrito de que iba a recogerlos. La explicación fue que se había cometido “un error” con los números de identificación. Por todo ello, desde la Protectora de Animales piden poder encargarse ellos mismos de la gestión de la perrera municipal, porque están convencidos de que lo haría mucho mejor e, incluso, a un precio inferior.
No se sabe la cantidad por la que el Ayuntamiento tiene concertado el servicio con SEMAT, pero sí que dicho contrato está vigente hasta 2017. En breve, responsables de la Protectora mantendrán una reunión con miembros del Ayuntamiento, pero Sara Menor no tiene puestas muchas esperanzas en al cita. Y es que recuerda que son muchos los acuerdos alcanzados que luego se quedan en nada. Falta interés en el Equipo de Gobierno por encontrar una solución a la perrera, pero desde la Protectora van a seguir denunciando la situación. Es más, han abierto una petición en change.org, que lleva ya más de 6.600 firmas recogidas.