0-1. El Mirandés se abona a las victorias sobre la bocina
Juanjo regala la segunda victoria consecutiva al Mirandés con un gol en el minuto 90 frente a un Recreativo de Huelva incapaz de superar a los rojillos
Los de Terrazas cogen aire en la clasificación tras un gran mes de noviembre
El Mirandés celebró su segunda victoria consecutiva. LFP
El CD Mirandés parece abonado a la épica. El conjunto rojillo ha sumado esta tarde frente al Recreativo de Huelva su segunda victoria consecutiva -algo que no había conseguido en la presente temporada- repitiendo el mismo guión que el pasado fin de semana, con un gol en el último suspiro. El tanto de Juanjo en el minuto 90 sentenció un choque en el que de nuevo hubo poco fútbol y menos ocasiones, pero que sirve al Mirandés para meter distancias con los puestos de descenso y dar un significativo salto en la clasificación.
Ficha Técnica
CD Mirandés: Razak; Caneda, Álex Ortiz, Corral, Kijera; Provencio; Jordi Pablo, Igor Martínez (Juanjo, min.87), Carnicer (Barahona, min.58), Álex García (Javi Cantero, min.91); Urko Vera.
Recreativo de Huelva: Sotres; Córcoles, Diego Jiménez, Juanan, Víctor Díaz; Jesús Vázquez, Montoro (Manu Molina, min.72); Pedro Ríos (Rubén Mesa, min.84), Álvaro Antón, Núñez (Braulio, min.58); Joselu.
Goles: 0-1, min.90: Juanjo.
Árbitro: Areces Franco (Colegio Asturiano). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Álvaro Antón y Pedro Ríos y a los visitantes Álex Ortiz, Álex García, Fran Carnicer y Jordi Pablo.
Incidencias: Partido correspondiente a la décimo quinta jornada de la Liga Adelante disputado en el Nuevo Colombino de Huelva ante 6.403 espectadores.
Empezó el partido muy trabado. El orden táctico de ambos conjuntos impedía cualquier floritura y el juego no terminaba de fluir. Sin embargo, el Mirandés se antojaba un punto más cómodo sobre el césped, conocedor de que la solidez defensiva era vital en un partido como éste. En ese escenario, las ocasiones tardaron en llegar. El primero en intentarlo fue Álex García con un disparo desde la esquina el área que se fue a las nubes. Tampoco tuvo fortuna Pedro Ríos en un gran contragolpe de los onubenses que obligó a Razak a salir muy lejos de su área para enviar el esférico fuera de banda.
A raíz de ese acercamiento, el Recre comenzó a desquitarse la asfixiante presión rojilla y comenzó a circular con más criterio. En el 14, Joselu probó con un remate de cabeza a la salida de un saque de banda, pero el balón se marchó muy desviado. El propio Joselu la tuvo 10 minutos después con una espuela dentro del área que no acertó a conectar con claridad, desaprovechando una buena jugada colectiva.
Las transiciones onubenses no tenían nada que ver con las del Mirandés, que una vez más se encomendó a un peleón Urko Vera, demasiado desconectado del resto del equipo en la punta de ataque. Aún así, el conjunto rojillo no se sintió inferior en ningún momento y también pudo poner el primero en el marcador en el 27 con una jugada a balón parado. Jordi Pablo sacaba una falta lateral, Urko Vera no conseguía rematar de primeras, el balón quedaba muerto y el delantero vizcaíno lo probaba en segunda oleada sin fortuna.
Poco más dio de sí la primera parte. Si acaso una fantástica jugada del Recre en el 35 desaprovechada por Álvaro Antón, cuyo disparo se fue muy desviado. Hoy no era el día de los delanteros.
Un seguro Razak
El guión del encuentro cambió poco tras el descanso. El conjunto onubense seguía intentando progresar ante un Mirandés muy correoso e intenso, que dejaba pocos espacios para la creación y aprovechaba cualquier oportunidad para buscar a Urko Vera por alto. Aún así, el Recre supo medir mejor los esfuerzos y acabó encontrando el hueco para hilvanar su juego, permitiendo que Ríos y Joselu probaran a Razak con sendos remates. El portero ghanés se mostró muy seguro durante todo el choque y se irguió como protagonista con una impresionante parada a mano cambiada que desvió a córner un gran disparo de Joselu.
Ya en los últimos compases, el partido terminó de romperse y aparecieron las desconexiones defensivas. En una de esas, Barahona aprovechó para salir al contraataque por la derecha. El canterano le ganaba la partida a su par, alcanzaba la línea de fondo, amagaba y se inventaba un pase preciso para la llegada por el centro de Juanjo, que no tuvo nada más que hacer que empujar la pelota para poner el 0-1 en el marcador y de paso sentenciar el choque.
A partir de ahí, el Mirandés cerró filas, perdió algo de tiempo con un postrero cambio y a punto estuvo de poner más distancia en el marcador con una jugada idéntica a la del primer gol. Sin embargo, en esta ocasión la puntería de Juanjo brilló por su ausencia y el delantero mandó el balón al segundo anfiteatro.
Al final, tres puntos de oro para un Mirandés que cierra el mes de noviembre sin conocer la derrota y sin haber encajado ni un solo gol a pesar de haberse enfrentado con rivales llamados a pelear por el ascenso. Sin duda, un plus de confianza para afrontar los próximos compromisos.
