1-2. El Burgos CF cumple ante el Lealtad

Lo que debía ser un mero trámite se tornó en un partido trabajado en el que los burgaleses fueron superiores

Cristian y Gabri fueron los artífices de la victoria

El Lealtad lo intentó en la segunda parte y con la expulsión de Dani Guillén estuvieron cerca de conseguir el empate

1-2. El Burgos CF cumple ante el Lealtad Cristian marcó el primer gol de penalti. TPA

Partido completo del Burgos CF que consiguió llevarse los tres puntos del Municipal de Las Callejas, a pesar del “ambiente hostil”. Lluvia, niebla y un árbitro que castigó a los morados con un penalti inexistente y no señaló uno por claro agarrón a Cristian.

A pesar de todo, los de Fede Castaños supieron sacar el partido adelante. Un gol de penalti de Cristian y uno de cabeza de Gabri fueron méritos suficientes para llevarse los tres puntos. No faltó el momento convulso con un gran error de la defensa que permitió, con tiempo suficiente, marcar a un Lealtad que entraba de nuevo en el partido con el 1-2.

Ficha Técnica

1 – CD Lealtad: Javi Porrón; Keko, Hedrera, Marcos, Jaime Turégano (Chicho min. 80); Matías, Yosu, Piniella, Pablo Espina; Jorge y Lombán.

2 – Burgos CF: Álvaro del Val; Andrés, Maureta, Quesada, Manu Torres; Moke, Beñat ; Jorge Sáez , Gabri Gómez (De Vicente min. 81), Carralero (Javi Hernández, min. 67); Cristian (Manu Torres min. 92).

Goles: 0-1 Cristian (min. 48), 0-2 Gabri (min. 62), 1-2 (min. 72).

Árbitro: Álvaro López Parra (Colegio cántabro). Mostró tarjeta amarilla al jugador local Hedrera, Keko, Matías, Pelayo y a los visitantes Álvaro del Val, Gabri Gómez, Adrián, Javi Hernández y Dani Guillén con doble amarilla.

Incidencias: Partido correspondiente a la décimo cuarta jornada del Grupo I de la Segunda División B disputado en Las Callejas ante unos 800 espectadores.

Se replegó el Burgos y expulsaron a Dani Guillén con dos tarjetas amarillas, pero, con sufrimiento, los morados cumplieron, trayéndose tres puntos en el campo del penúltimo clasificado.

El Partido

El Burgos CF salió al Municipal de Las Callejas con la intención de poner la dirección de juego de su parte, pero las dimensiones del campo propiciaron más un partido de idas y venidas, con mucho balón aéreo. Los morados fueron los primeros en tener buenas oportunidades de gol. La primera de ellas la fabricó Carralero, con una buena carrera que le dejó solo ante el portero, que consiguió adivinar sus intenciones. De manera sucesiva, en el minuto 13 Gabri Gómez se hacía con un balón en la frontal del área y lo cruzaba cerca del poste de la portería que defendía por Javi Porrón.

Sin embargo, la sorpresa llegaba en el minuto 17 cuando el colegiado, Álvaro López Parra, señalaba un penalti inexistente a la salida de Álvaro del Val que le quitó de los pies el balón a Jorge. El mismo delantero fue el encargado de lanzar el lanzamiento que acabó estrellándose en el poste.

En el 31 la situación se invirtió. Un penalti claro por agarrón a Crisitian se saldó con una amarilla para el delantero burgalés por simulación. No se deshacía en el empate y las ocasiones escaseaban. No fue hasta el minuto 45 cuando un saque de falta ensayado que remataba Beñat fuera. No se conformaría el Burgos que tuvo otra ocasión en un lanzamiento de Moke desde la frontal del área que no atajó Javi Porrón y el balón suelto, lo metió en la portería Cristián. Gol que fue invalidado por fuera de juego.

La segunda parte arrancó con un temprano penalti de Pelayo a Cristián que se encargaba de lanzar con mucha parsimonia, un penalti que engañó al meta local y puso el 0-1. El partido pasó por una fase de constantes interrupciones, faltas, fueras y reproches que dejaban poco fútbol en Las Callejas. En una de esas ocasiones de las que no se espera mucho marcó gol Gabri de cabeza. Un centro al centro del área que el jugador del Burgos picó para batir al portero asturiano por segunda vez.

Cuando todo parecía decidido, en el minuto 72 apareció el Lealtad con un buen gol que batía a Del Val y ponía la pimienta al partido. El Burgos de Fede se replegaba. Entraba De Vicente para intentar poner más control en el centro del campo, el sacrificado, Gabri Gómez. Todo se complicó aún más con la expulsión, por doble amarilla de Dani Guillén. Los intereses de los visitantes no se vieron afectados y se volvieron de “tierra hostil” con tres puntos que debían ser un mero trámite.