Una prueba ambiental determinará si los vecinos pueden volver a Cótar y Villafría
El alcalde pide tranquilidad a los burgaleses porque no hay riesgo para el resto de la ciudad, a la espera de lo que ocurra con el viento
Las mediciones se realizarán esta tarde, para controlar el grado de toxicidad del humo que emite un incendio que sigue sin estar controlado
Unos 140 evacuados están en el Talamillo, donde se les ha dado de comer, y se han habilitado 100 camas para mayores y enfermos
Los bomberos aún no han podido entrar las instalaciones, por lo que se desconoce la causa y el grado de afección a las tuberías cargadas de amoniaco
La intensa humareda afectaba a diferentes barrios de la ciudad. PCR
El alcalde de Burgos, Javier Lacalle, ha pedido “tranquilidad” a los burgaleses ante el incendio que, desde las 6:30, afecta a la fábrica que Campofrío tiene ubicada en el Polígono de Gamonal. Los Bomberos de Burgos, con 37 efectivos desplazados al lugar y alrededor de 8 vehículos, continúan trabajando en una planta que, tal y como ha reconocido el alcalde, es irrecuperable. El fuego no se da por controlado, de hecho los bomberos no han podido aún entrar en las instalaciones, lo que dificulta conocer el estado en el que se encuentra su interior y, sobre todo, la afección de las tuberías cargada de amoniaco. El depósito, sin embargo, está fuera de peligro.
Javier Lacalle ha comparecido a las 14:00 para informar a los medios de comunicación sobre la última hora en relación con este incendio, que ha acabado con una de las factorías más destacadas de la capital. Un operativo compuesto por 200 miembros, entre personal del Ayuntamiento, la Junta de Castilla y León y el Gobierno Central, lleva toda el día trabajando intensamente, en bajo la coordinación del Centro de Emergencias instalado en Policía Local. El Plan Municipal de Emergencias se activó a las 9:00, ha recordado el alcalde, tras comprobar que la situación “se agravaba”.
Desalojos
Bomberos, Policía Local y Sacyl trabajan en este importante incendio. GIT
Dentro de ese Plan de Emergencias es donde se tomó la decisión, “velando por la seguridad de los vecinos”, de evacuar los barrios de Cótar y Villafría, así como la Barriada Moisés, ante el riesgo que supone el humo tóxico que está desprendiendo en estos momentos la factoría, fruto del amoniaco que circula por las tuberías del sistema de refrigeración (en torno a los 25.000 litros, según Salvador de Foronda). Son alrededor de 400 los vecinos afectados, de los que 140 se encuentran en el Polideportivo José Luis Talamillo, habilitado para la ocasión, mientras que los niños han sido traslados al Cívico de Río Vena.
En ambas instalaciones se les está proporcionando comida, mantas y otros recursos que puedan necesitar, y permanecerán a su servicios “por si fuera necesario que los vecinos pasasen la noche” fuera de sus domicilios. Del mismo modo, el Ayuntamiento de Burgos ha habilitado 100 camas, en diferentes hostales y residencias de la ciudad (como el San Juan de Dios), para personas mayores o enfermos. El operativo se modificando “en función de cómo evolucionen los acontecimientos”, ha asegurado Javier Lacalle, adaptándose a las nuevas necesidades.
De momento, para esta tarde está previsto que se llevan acabo pruebas ambientales, que serán las que determinen si los vecinos pueden volver a sus domicilios o no. Igualmente, dependiendo de las condiciones meteorológicas, y de su el viento vira de dirección, pudiese darse la circunstancia de que alguna otra zona de la ciudad se viese afectada por el humo. De momento “no hay riesgo”, pero avisados están en Castañares, Rubena o Cardeñajimeno. Javier Lacalle ha destacado la “solidaridad de los burgaleses”, dado que muchos de los evacuados están ahora en viviendas de amigos y familiares.
El peligro del amoniaco
La fábrica ha quedado irrecuperable. GIT
El Plan Municipal de Emergencias continuará activo mientras el incendio no se dé por controlado, o se pueda detectar algún riesgo para la ciudad. El alcalde ha negado que se haya producido ningún tipo de explosión en el depósito de amoniaco, rumor que ha corrido por las redes sociales, insistiendo en que los bomberos ya tienen controlado el tanque, con unos 10.000 litros de material. Lo que se desconoce es cómo de afectadas están las tuberías del sistema de refrigeración, que contiene 25.000 litros de amoniaco, porque los bomberos aún no han podido entrar al interior de las instalaciones.
“Es posible que parte de esas tuberías hayan podido verse afectadas”, ha señalado el alcalde, “pero no se sabe a ciencia cierta”. Dada la imposibilidad de acceso, los servicios de extinción de incendios tampoco pueden explicar cómo se ha iniciado el fuego. Se habla de un cortocircuito en la zona de ‘Cocidos’, pero no hay nada seguro. En el momento en el que se declaró el incendio había alrededor de 20 personas trabajando en el interior, según Javier Lacalle. El alcalde ha asegurado que, dentro de la “desgracia”, “afortunadamente no hemos tenido ninguna víctima personal”.
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