Flores para los Santos, una tradición que se moderniza

La planta de crisantemo se iguala en fama a los gladiolos y los claves, siendo ramos y centros los protagonistas de la jornada

El gasto medio oscila entre 25 y 30 euros, habiéndose mantenido estables los precios a pesar de los incrementos en la materia prima

Las floristerías claman contra los puestos de venta directa y piden mayor control del Ayuntamiento sobre producto y vendedor

Flores para los Santos, una tradición que se moderniza Centros, ramos, claveles y gladiolos, estrellas en los cementerios. PCR

Claveles y gladiolos siguen siendo las flores estrella en el Día de Todos los Santos, aunque también han cogido mucho auge las plantas naturales de crisantemos. Los ramos y los centros son los protagonistas, frente a las tradicionales coronas y cruces, que hace algunas décadas predominaban en los cementerios españoles. El ciudadano va cambiando de hábitos y gustos, modernizándose y adaptándose a nuevas realidades, también en lo que a la compra se refiere, y es que eso de dejar para el último minuto la adquisición del recuerdo a los difuntos se ha ido sustituyendo por el encargo y la recogida en las vísperas.

Son realidades que todos podemos comprobar en un día como hoy, 1 de noviembre, si nos acercamos a cualquiera de los campos santos de nuestra provincia, pero también lo confirma José Manuel González, de Floristería Castilla. Como presidente de la asociación gremial, González calcula que las floristerías de la ciudad habrán despachado en torno a 400.000 euros de pedidos. En Floristería Castilla han sido más de 2.000 encargos, unos 1.000 ramos y unos 500 centros, con precios que permanecen estables desde los últimos siete años.

Las floristerías denuncian que algunas de las ventas de calle proceden de los propios cementerios. PCR

Las floristerías denuncian que algunas de las ventas de calle proceden de los propios cementerios. PCR

El gasto medio por cliente oscila entre 25 y 30 euros, lo que quiere decir que han sido los establecimientos los que han asumido las subidas registradas en la materia prima, subidas como la experimentada con el IVA, que ha pasado del 16 al 21 por ciento. Así las cosas, el margen comercial se ha reducido, aunque esperan que la situación vaya mejorando. Se gastará un poco menos, se optará por productos más sencillos, pero los burgaleses no se olvidan de recordar con flores a sus seres queridos ya fallecidos en una fecha tan señalada.

“Compitiendo” con los puestos de calle

Una de las principales preocupaciones del colectivo, al margen de la crisis y de los cambios en los hábitos del consumidor, es la proliferación de puestos de venta directa de centros y ramos. Espacios comerciales que se abren durante un única semana al año o puestos en los mercados Norte y Sur que “si están ahí, será porque son legales”, supone González. De lo contrario, la responsabilidad habrá que achacársela al Ayuntamiento de Burgos. “No es problema de quien vende las flores, sino del Consistorio”, insiste el presidente gremial.

Y es que no todos los puntos de venta cuentan con la preceptiva licencia administrativa, pero en muchas ocasiones al Ayuntamiento le da miedo poner orden y acabar con situaciones fraudulentas e incluso delictivas. González asegura que, en algunos casos, las flores que se venden proceden directamente de los cementerios, vamos, que son robadas. El presidente recuerda que, antaño, el mercado de Las Bernardas se permitía para dar salida a las flores que se cultivaban en las huertas de las barriadas, pero de aquello ya no queda nada, y debe ser el Ayuntamiento el que vigile este tipo de competencia desleal.