Castilla y León, más preparada frente al ébola

Sanidad incrementa hasta 5.293 el número de EPI’s distribuidos en hospitales, centros de salud y Emergencias

Se han realizado 134 cursos formativos para 1.270 profesionales sanitarios, con refuerzo en la colocación de los trajes de protección

El HUBU cuenta con una zona reservada en Medicina Interna, a la que sólo se accede a través de un itinerario controlado

Castilla y León, más preparada frente al ébola La Junta incrementa la distribución de EPI's. BC

El Hospital Universitario de Burgos, así como los otros tres centros de referencia en Castilla y León, ya están preparados ante un posible caso de ébola o sospecha de contagio en la región. La Consejería de Sanidad ha comunicado esta tarde las últimas actuaciones llevadas a cabo, que permiten incrementar hasta 5.293 el número de equipos de protección individual (EPI) distribuidos en hospitales, centros de Atención Primaria y servicios de Emergencias, y que se completan con los espacios reservados en el Río Hortega de Valladolid y los tres universitarios de Burgos, León y Salamanca.

Carteles informativos sobre las medidas de protección. BC

Carteles informativos sobre las medidas de protección. BC

Antonio María Sáenz Aguado insistía hace algunos días en que Castilla y León tenía perfectamente controlado el protocolo de actuación ante la aparición algún caso de ébola o sospecha del mismo. Alrededor de 1.270 profesionales sanitarios han participado en los 134 cursos realizados por Sanidad, y que han servicio para explicarles cómo se deben colocar los equipos de protección y, fundamentalmente, cuál es la forma correcta de retirarlos. Estas explicaciones se han intensificado tras descubrirse el contagio de la auxiliar de enfermería Teresa Romero, y al sospecharse de un error en la utilización del EPI como causa del mismo.

Además, la Consejería ha aumentado el número de equipos de protección individual en hospitales, Atención Primaria y Emergencias, tras las denuncias realizadas por el Sindicato de Enfermería SATSE. El colectivo aseguraba recientemente que, si bien la orden de enviar los equipos se había dado en el mes de septiembre, los profesionales sanitarios habían detectado escasez de los mismos, deficiencias e incumplimiento de mínimos en diferentes centros de toda la comunidad autónoma, incluidos los cuatro hospitales de referencia para la crisis del ébola.

Protocolos en los hospitales

El HUBU cuenta con la planta 7 de Medicina Interna para el ébola. BC

El HUBU cuenta con la planta 7 de Medicina Interna para el ébola. BC

Al mismo tiempo, se han conocido otros aspectos del protocolo de intervención. Los hospitales universitarios de Burgos, León y Salamanca, junto con el Río Hortega de Valladolid, cuentan ya con espacios reservados para la atención exclusiva de posibles casos de ébola. Se trata de habitaciones ubicadas en unidades cerradas, todas ellas en Medicina Interna, a las que sólo se puede llegar a través de un itinerario claramente definido y en el que todos los profesionales implicados han sido adecuadamente formados para saber cómo actuar en cada momento.

En el caso del HUBU, el área reservada es la planta 7 del Bloque H, sin utilizar desde la apertura de las nuevas instalaciones. Desde SATSE reconocen la existencia de un itinerario desde Urgencias hasta la zona protegida, pero echan en falta que aislamiento respiratorio en la plaza. Si bien es cierto que el ébola no se transmite vía aérea, sino a través de contacto físico o con fluidos corporales, las enfermeras consideran necesario habilitar un área con presión negativa, que impidiese la salida de los microbios y del virus y, en su caso, una posible propagación.

Igualmente, los sindicatos sanitarios han pedido una reunión con los responsables del Hospital Universitario de Burgos y de la Consejería de Sanidad para intentar mejorar el protocolo. Insisten en que la formación y la información no ha llegado de manera “adecuada” a todos los servicios, caso de Urgencias, por lo que se requiere de un refuerzo. Eso sí, los sindicatos lanzan un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía, recordando que el caso de Teresa Romero es aislado y excepcional, aunque toca investigar qué es lo que ha ocurrido exactamente.