El amor todo lo puede, los celos son amor y otras falacias rosas
La Asociación de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Violencia Doméstica publica su informe anual sobre cómo entienden los adolescentes las relaciones de pareja
El 14% de los encuestados justificaría todo por amor, mientras que un 13% de las chicas sigue pensando que los celos demuestran que te quiere
El 83% estaría dispuesto a dejar a su pareja si sufre malos tratos, pero crece el número de los chavales que perdonaría un comportamiento violento
124 de los jóvenes entrevistados conoce algún caso de violencia de género, lo que demuestra que estamos ante un problema latente
El amor todo lo puede. Frase bonita y romántica donde las haya, muy apropiada para un guión cinematográfico, pero que en la vida real puede esconder comportamientos inapropiados en una relación de pareja, con casos de violencia de género física y psicológica incluidos. Y es que, es verdad, el amor lo puede (casi) todo: enfermedades, pérdidas familiares, fracasos laborales… Pero cuando los más jóvenes de nuestra sociedad dicen esta frase no siempre se refieren a lo mismo que lo hacen los adultos. A veces, detrás se encuentra la aceptación de los celos, el control, la supervisión constante…
La Asociación de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Violencia Doméstica de Burgos ha presentado su informe relativo a los talleres que realiza anualmente en centros escolares de la capital y la provincia, con los que intenta hacer un diagnóstico sobre cómo entienden los adolescentes las relaciones sentimentales, la igualdad de género y la violencia en la pareja. Se trata de saber si son capaces de detectar maltrato físico, pero sobre todo psicológico y sexual. Si están concienciados sobre lo que supone la violencia de género y cómo hay que actuar cuando se detecta.
Relaciones posesivas y controladoras
“Existe una creencia muy generalizada en torno al amor: ‘el amor lo puede todo’ y ‘mientras más sufrimiento haya, más fuerte será el amor'”
Igualmente, los talleres intentan eliminar mitos, modelos de comportamiento, estereotipos y errores muy comunes en nuestra sociedad y que se mantienen, a pesar del trabajo en sensibilización y concienciación que se lleva realizando durante tantos años. Uno de los datos más significativos de este informe es que, precisamente, entre nuestra adolescencia existe esa creencia, “muy generalizada”, de que el amor todo lo puede. Así lo afirma el 12 por ciento del alumnado encuestado durante el último curso escolar. Destacar que esa idea está más arraigada entre las chicas (un 20 por ciento) que entre los chicos (un 3 por cierto).
Esto nos lleva a la aceptación de relaciones tóxicas, es decir, el 14 por ciento de los encuestados estaría dispuesto a justificar, soportar y perdonar todo por amor, y en ese todo entra que tu pareja esté todo el tiempo pendiente de ti, que te llame constantemente, que quiera que pases todo el tiempo juntos… Lo que más llama la atención a los miembros de la asociación es que este tipo de comportamiento es más demandado en el caso de los chicos, colectivo en el que se detecta una mayor tendencia a desear una relación controlada y posesiva.
Mientras, las chicas son más de considerar que los celos son normales, y hasta necesarios, en cualquier tipo de relación, puesto que demuestran que hay amor. Un 13 por ciento de las alumnas participantes en los talleres así lo piensan. Y ¿a qué tienen miedo los chavales en una relación de pareja? Pues ellos, según este informe, a que sus chicas mantengan relaciones sexuales con otra persona, y ellas, a que sus chicos desarrollen una relación emocional profunda con otra chica.
Intervención, no siempre
“El incremento de la violencia de género entre parejas jóvenes debería hacernos reflexionar sobre las deficiencias de lo modelos sociales de aprendizaje de relaciones amorosas”
En lo que se refiere al maltrato, la mayor parte de los alumnos (un 83 por ciento) afirma que, de encontrarse en esa situación, abandonaría a su pareja. Sin embargo se ha notado un cierto incremento en el número de chavales que estaría dispuesto a perdonar un comportamiento violento. Los adolescentes reconocen que si la mujer no deja a su pareja aún sufriendo maltrato es por miedo (un 65 por ciento de las respuestas), por amor (un 39 por ciento) o por las promesas de cambio que él les hace (un 10 por ciento).
Y son las chicas las que mejor entienden este comportamiento, porque también son conscientes de que muchas mujeres que sufren violencia de género se creen culpables de la situación y sienten hasta vergüenza. Sin embargo, son más los chicos que las chicas los que piensan que el problema del maltrato en la pareja es un asunto de puertas para adentro. Si bien es cierto que el 87 por ciento de los alumnos asegura que estaría dispuesto a intervenir si detecta un caso de estas características, el 16 por ciento dice que sólo se debe hacer en situaciones graves.
Durante los talleres, un 21 por ciento de los encuestados (124) aseguraron conocer algún caso de violencia de género, es decir, hay 124 personas que tienen a su alrededor (familiares, amigos, conocidos) que están inmersos en una situación de maltrato físico o psicológico. Esto demuestra, a juicio de la asociación, que seguimos estando ante un problema latente, que tarda mucho en salir a la luz. Continuamos viviendo en una sociedad en la que predominan los valores androcéntricos, las situaciones de discriminación y desigualdad y en la que los viejos estereotipos no lo son tanto, recuerdan desde el colectivo.