Detenidas por simular un robo con intimidación con arma blanca
La Guardia Civil arresta a dos mujeres por simular el robo de un teléfono móvil de última generación e intentar cobrar el seguro en la comarca de Las Merindades
Los agentes descubrieron incongruencias en el relato de los hechos
La Guardia Civil ha detenido en la comarca de Las Merindades, a A.G.G., de 32 años, y V.C.L., de 28 años de edad, como presuntas autoras de los delitos de simulación de delito y de estafa en grado de tentativa, al denunciar falsamente un robo con intimidación. Según explican fuentes de la Benemérita, los hechos se remontan al pasado mes de julio. Las ahora detenidas denunciaron la comisión de un robo con intimidación en el negocio que regentaban ubicado en una localidad al norte de la provincia.
Minutos antes de las tres de la tarde, aseguraron que un hombre armado con una navaja había entrado en el establecimiento, y que tras amenazarlas había sustraído una importante cantidad de dinero y un teléfono móvil de última generación, propiedad de una de las víctimas. El Equipo de Policía Judicial de Miranda de Ebro abría una investigación, dentro de la denominada Operación FARSA, para el esclarecimiento de los hechos, identificar, localizar y detener al supuesto autor.
Desde el primer momento la investigación se tornó complicada, por la ausencia de huellas y vestigios con las que poder trabajar. La información obtenida durante las pesquisas fue convenientemente cotejada, obteniéndose una serie de contradicciones aisladas, pero que debidamente analizadas y conexionadas, levantaron las sospechas de los investigadores.
El hecho que más llamó la atención fue que el teléfono que supuestamente había sido sustraído en el negocio el día 14 de julio, fue encontrado por un particular días antes en Bilbao, lo que hacía imposible que fuera robado días después en Burgos. El estudio pormenorizado del arqueo que presentaron para justificar la parte de dinero sustraído de la caja fuerte tampoco casaba.
La explotación final de operación ha determinado que ambas mujeres simularon el delito de robo para cobrar la indemnización del seguro por la sustracción del teléfono móvil, que ha sido recuperado, y del dinero que supuestamente se llevó el atracador.