FAE alega contra la tasa de tratamiento de residuos
La Confederación de Asociaciones Empresariales solicita que se reduzca el índice corrector aplicado a los inmuebles industriales
La tasa ingresada por muchas empresas de la provincia en 2014 se ha incrementado, pasando de 41 a 424 euros anuales
El Consorcio de Tratamiento de Residuos grava doblemente a las industrias de la provincia, sin tener en cuenta si producen o no residuos urbanos
Tras llevar más de un año manteniendo reuniones con el Consorcio de Tratamiento de Residuos de la Provincia de Burgos, en las que se ha analizado la variación de la cuota a pagar en 2014 por parte de las empresas de la provincia, con incrementos que en muchos casos han supuesto pasar de los 41,76 euros al año a los 424,05 euros, FAE ha decidido movilizarse. Y lo hace presentando alegaciones a la aprobación de la Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa por la Prestación del Servicio de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos para el ejercicio 2015.
De entre todas las que se presentarán, la alegación más importante se refiere a solicitar la reducción del coeficiente índice corrector que dicha ordenanza contempla para los “inmuebles de uso industrial con actividad”, y que actualmente se calcula en un 5,5, aunque puede llegar al 6,6. Desde la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos consideran que este coeficiente es “absolutamente desproporcionado” con respecto al resto de índices correctores que contempla la ordenanza, y que se encuentra entre al 0,6 y el 3,0, para los casos en los que los usos del inmueble no son industriales.
“Penalizando” a la industria
Por tanto, el “uso industrial” se ve gravado por un doble indicador que puede llegar a multiplicar la cuota establecida en la ordenanza por 6,6 veces, en función de los metros cuadrados de superficie. Además, la ordenanza no diferencia entre actividad fabril, mero almacén o nave, empresas de transportes o de servicios…, como tampoco se valora la capacidad de generación de residuos de cada una de las actividades industriales. Se asume directamente que, al ser un uso industrial, tiene una mayor capacidad económica o más potencial para generar residuos.
Sin embrago, recuerdan desde FAE, se puede comprobar claramente que en el caso de la mayoría de las empresas del ámbito rural no se genera ningún tipo de residuo urbano, que es al fin y al cabo el objetivo de esta ordenanza: el tratamiento y eliminación de los residuos urbanos. Con todo ello, la confederación considera que esta ordenanza “no ayuda ni fomenta la instalación ni el mantenimiento de empresas en el ámbito rural, con los perjuicios que ello implica desde un punto de vista laboral y económico para ámbito rural de la provincia de Burgos”.