Un proyecto de ingeniería concretará cómo hacer los drenajes en Villatoro
Tras el informe del Instituto Geológico toca determinar por dónde circula el agua subterránea y cómo se producen las filtraciones
El trabajo de los ingenieros permitirá definir qué tipo de canalizaciones o drenes se deben de construir y, sobre todo, su coste
El Ayuntamiento tiene que decidir quién realizará el proyecto (técnicos municipales o empresa externa) y cómo se financiará
Un proyecto de ingeniería, a elaborar por técnicos del Ayuntamiento de Burgos o por alguna empresa externa, determinará con precisión qué es lo que se tiene que hacer para acabar con los problemas de grietas que afectan a las viviendas de Villatoro. Es necesario saber exactamente cuál es el paso del agua subterránea, a qué profundidad se encuentra y por dónde se producen las filtraciones, para saber con exactitud dónde se deben de colocar los diferentes drenes que desviarían el agua del subsuelo del barrio burgalés hasta el otro lado de la BU-30, al Río Ubierna.
La necesidad de elaborar un proyecto de estas características ha sido la principal conclusión a la que se ha llegado durante la reunión mantenida esta mañana entre representantes de Aguas de Burgos y del Consejo de Barrio de Villatoro con los técnicos del Instituto Geológico y Minero. Estos últimos se han acercado a Burgos, tal y como habían prometido, para explicar el informe en el que se analizan las causas de las grietas que amenazan la estabilidad de los edificios de Villatoro, así como las posibles soluciones a corto y medio plazo que se pueden aplicar.
Concretar intervenciones
Teniendo en cuenta que lo principal es sacar el agua subterránea, evitando que siga horadando el terreno compuesto fundamentalmente por yeso, haciendo ceder el subsuelo y provocando las grietas, es fundamental que se decida qué tipo de canalizaciones o drenajes se van a tener que realizar. De ahí la necesidad de solicitar un proyecto de ingeniería, compromiso que ha adquirido el Ayuntamiento de Burgos en esta reunión, según el presidente del Consejo de Barrio de Villatoro, Sergio Simón. La parte más complicada, al menos ahora, es saber quién elaborará el documento y cómo se pagará.
Podría ser Fomento, Medio Ambiente, Aguas de Burgos o, incluso, un estudio externo, el que se encargase de preparar el proyecto. Se deberán de realizar nuevas catas para saber exactamente por dónde pasa el agua (profundidad, velocidad…) y así concretar cuál es la mejor de las soluciones. Una de las principales preocupaciones de la concejal de Medio Ambiente y máximo responsable de Aguas de Burgos, Carolina Blasco, es el coste que la actuación y las posibles consecuencias futuras que una intervención de estas características sobre el subsuelo pudiese tener.
Cuanto antes, mejor
Y es que, de acuerdo con el informe del Instituto Geológico y Minero, dos deben de ser las medidas prioritarias. Por un lado, bombear el agua en los puntos anteriores a las viviendas, para que no sean los propietarios los que se encarguen de ello. Por otro, crear esas nuevas canalizaciones y drenes, que dependiendo de dónde y cómo se hagan tendrán un coste u otro para el Ayuntamiento. A los vecinos “lo que nos interesa es que se haga lo que se tiene que hacer”, y lógicamente si se puede hacer con una inversión reducida, mejor, de ahí que entiendan el interés de Blasco de sopesar todas las alternativas.
De todos modos, Sergio Simón asegura estar satisfecho, porque han conseguido un informe en el que se determinan las causas de las grietas y un compromiso municipal de solventar el problema. Ahora toca esperar a disponer de se proyecto de ingeniería, a que se concreten las soluciones y, por supuesto, a que se puedan llevar a cabo. Sin hablar de plazos, el presidente del Consejo de Barrio de Villatoro asegura que, en lo que al proyecto se refiere, se podría elaborar en unas cuantas semanas, una vez se determine quién lo hará y cómo se pagará.