Punto y final a la “atípica” situación del vertedero de Abajas

Junta de Castilla y León, Diputación, Ayuntamiento de Burgos y Consorcio Provincial de Residuos firman el convenio para la ampliación y gestión del vertedero

Se prevé reducir el coste del servicio y la tasa de tratamiento de residuos

La vida útil del vaso 1 se ha incrementado con la ampliación operativa desde hoy

Punto y final a la “atípica” situación del vertedero de Abajas Lacalle, Silván, Rico y Escribano firmaron el acuerdo. GIT

Ha hecho falta esperar más de 12 años, pero por fin se ha puesto punto y final al conflicto generado a raíz del uso y gestión del vertedero de Abajas. El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, Antonio Silván, el presidente de la Diputación, César Rico, el alcalde de Burgos, Javier Lacalle y el presidente del Consorcio Provincial de Residuos, Víctor Escribano, han formalizado esta mañana el convenio para la ampliación de Abajas. Un convenio tan esperado como demandado para acabar con los desfases económicos y problemas de gestión que ha provocado durante años la falta de un vertedero de titularidad provincial. 

Tras varios meses de negociaciones y “decenas de reuniones” a varias bandas, las administraciones burgalesas han conseguido la implicación de la Junta de Castilla y León en la gestión del vertedero. Una implicación que se realizará a través de la empresa pública Somacyl y que permitirá el sellado del vaso 1 y la construcción y gestión durante 15 de años del vaso 2. Según contempla el acuerdo, las labores de sellado del primer vaso correrán a cargo del Ayuntamiento de Burgos, titular del vertedero, que cederá los terrenos necesarios para la construcción del segundo vaso.

Por su parte, la Junta de Castilla y León aportará el 30 por ciento del coste de construcción del vaso dos, una financiación que se complementará con la propia presencia de Somacyl, cuya experiencia en este tipo de actuaciones permitirá abaratar los costes generales de la propia obra.

Reducción de la tasa

Una vez ratificado el convenio, todos los implicados confían en “mejorar” sensiblemente la gestión de los residuos de la provincia, lo que se traducirá en una reducción de los costes de tratamiento, que ahora mismo ascienden a más de 13 euros por tonelada y que podrían verse disminuidos a menos de 9. Una reducción que también se espera trasladar a los bolsillos de los ciudadanos a medio y largo plazo. De hecho, para el 2015 ya se prepara una reducción de alrededor del 4 por ciento en la tasa del Consorcio. Más tiempo tardarán en notarlo los ciudadanos de la capital, ya que dentro del recibo también se cobran otros aspectos, como el tratamiento selectivo de residuos reciclables.

Importancia de los plazos

A partir de ahora, se abre un nuevo escenario en el que los plazos serán clave. No en vano, por delante aún queda la tramitación administrativa y la propia ejecución de las obras, un proceso que deberá llevarse a cabo con diligencia para evitar un posible desajuste en la capacidad de vertido de Abajas. Y es que, el vaso 1 está prácticamente colmatado y ha sido necesario ejecutar una ampliación del 15 por ciento de su capacidad para dar servicio durante los próximos meses.

Esta ampliación, operativa desde hoy mismo, sumada a la construcción de la planta de vertido de residuos industriales no peligrosos, ha incrementado la vida útil del vertedero en un año y medio. Sin embargo, el plazo de ejecución del vaso dos alcanza los 8 meses y los plazos están muy ajustados, aunque desde el Ayuntamiento confían plenamente en llegar a tiempo aún en “el peor de los escenarios posible”.

Lo que está claro es que la firma de este acuerdo supone un antes y un después. Tanto Lacalle como Rico y Silván han hablado de convenio “largamente esperado” y “demandado”, asegurando que es fruto de un intenso “trabajo” realizado muchas veces en la sombra para dar forma a un acuerdo que supone un “ejemplo de colaboración” entre administraciones. Eso sí, sólo Lacalle ha admitido tímidamente que la entrada en vigor del convenio permite poner punto y final a una “situación atípica” que se arrastra desde hace 12 años.