1-2. Ejercicio de eficacia y primera victoria
El Mirandés vence al Racing de Santander en el Sardinero tras marcar dos goles en los dos únicos remates a puerta de todo el partido
El conjunto cántabro pudo remontar, pero los rojillos supieron leer el partido
El CD Mirandés sumó esta madrugada su primera victoria de la temporada al superar al Racing de Santander en un partido en el que los cántabros pusieron las ocasiones y los rojillos la eficacia, con dos goles en apenas dos remates entre los tres palos. Todo lo contrario que el Racing, que pecó de falta de pegada y escasa fortuna en los metros finales.
Ficha Técnica
1 – Racing de Santander: Mario Fernández; Orfila, Bernardo, Samuel, Saúl; Javi Soria (Juanpe, min.46); David Concha (Iván Moreno), Andreu, Granero (Mariano, min.54), Iñaki; Miguélez.
2 – CD Mirandés: Razak; Aitor, Caneda, Corral, Javi Cantero (Docal, min.67); Jordi Pablo (Igor Martínez, min.65), Rúper, Emilio, Álex García; Juanjo, Urko Vera (Pedro Martín, min.77).
Goles: 0-1, min.18: Rúper (p); 0-2, min.47: Caneda; 1-2, min.60: Mariano.
Árbitro: Sagués Oscoz (Colegio Vasco). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Bernardo, Saúl y Samuel y a los visitantes Jordi Pablo, Javi Cantero y Álex García.
Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada de la Liga Adelante disputado en El Sardinero ante unos 8.000 espectadores.
Empezó mejor el Racing, más asentado en el terreno de juego y con las ideas más claras. Concha y Miguélez se movían bien entre líneas, buscando en todo momento la superioridad para afrontar los últimos metros, pero la zaga rojilla se mantenía ordenada. Sin embargo, el empuje cántabro empezó pronto a materializarse en ocasiones. La primera llegó de la mano de Iñaki, que tras un desajuste defensivo se plantó sólo y con todo el tiempo del mundo para batir a Razak, pero el portero ghanés supo medir la salida y cubrir el remate para enviarlo a córner.
A partir de ahí, el Racing se lo creyó y comenzó a hacer circular la pelota con rapidez y eficacia, buscando un hueco entre la defensa rojilla que no terminaba de aparecer. Pero cuando mejor estaba jugando el conjunto cántabro llegó el mazazo del Mirandés. Corría el minuto 17 cuando Juanjo le hizo un lío a Samuel en la línea de fondo, la puso al segundo palo ante la llegada de Álex García, cuyo remate de cabeza se encontró con la mano de Bernardo. Penalti y balón para Rúper, que no falló desde los 11 metros.
A raíz del gol, el Mirandés se creció y asumió más protagonismo con el balón. Emilio Sánchez, que volvió a ser uno de los jugadores más destacados del choque, ponía la pausa al conjunto rojillo. Todas las transiciones pasaban por sus botas, y cada vez que tocaba el balón reinaba la cordura en el centro del campo.
Tras unos minutos de torrija, el Racing despertó de nuevo. En el minuto 25, Concha, quizá el mejor de los locales, mandó un balón al palo tras superar a Razak con una media vaselina dentro del área. No sería el único palo de la noche. La respuesta del Mirandés llegaría con un disparo cruzado de Emilio y con un par de remates de Urko Vera, que acabó desquiciando a los centrales cántabros.
Ya en los minutos finales, el Racing dio otro arreón y en apenas cinco minutos pudo igualar e incluso desnivelar a su favor el choque. En el 41, Corral sacaba de la misma línea de gol un remate de Granero en el segundo palo. Un minuto después, Concha recuperaba un balón en el centro del campo, arrancaba en busca del área y tras dejar atrás a dos defensas volvía a estrellar el balón en el poste. La fortuna se alió esta vez con el Mirandés.
Sentencia
Tras el descanso, el Racing volvió a salir más enchufado, aunque una vez más sin pegada. Todo lo contrario que el Mirandés, que apenas había tocado la pelota cuando puso el 0-2 en el marcador. En el 47, Caneda batía a Mario Fernández a la salida de un córner bien botado por Jordi Pablo. Un penalti, un córner y dos goles. No hace falta más.
Ante la desesperación verdiblanca, Paco Fernández decidió quemar todas sus naves y tiró de banquillo para poner a todos sus hombres de ataque en el campo. Faltaba Koné, sancionado, pero estaba Mariano. Apenas unos minutos después de saltar al terreno de juego, el delantero aprovechaba una carambola tras un disparo al larguero de Juanpe para batir a Razak, que ni siquiera vio por dónde entraba la pelota. Corría el minuto 60 y el Racing volvía a meterse de lleno en el partido.
Aún así, Terrazas supo leer el partido y tras dar entrada a los hombres de refresco ordenó ralentizar el juego de los suyos y cerrar líneas ante el vendaval que ya preparaba el conjunto cántabro. Las líneas aguantaron bien y la presión funcionó, obligando a los jugadores locales a buscar opciones más complicadas para combinar. Sólo a balón parado encontró algún hueco el Racing, pero su mejor ocasión, un cabezado de Miguélez en el 89 que acabó en el fondo de la red, fue anulada por fuera de juego.
Al final, tres puntos que viajan a Anduva y colocan al Mirandés en una posición relativamente cómoda tras la disputa de las dos primeras jornadas. Las piezas comienzan a encajar y todavía hay margen de mejora, pero los rojillos ya cuentan con un colchón de cuatro puntos.