El Ayuntamiento cancelará el préstamo del Plan Montoro
Tras dos años de ajustes, el Ayuntamiento cumple los requisitos para volver a solicitar préstamos más ventajosos a entidades financieras privadas
Se prevé una reducción del interés en casi 3 puntos respecto al préstamo del ICO
El Equipo de Gobierno espera reducir la deuda otros 15 millones antes de fin de año
El Ayuntamiento cancelará en las próximas semanas el préstamo del ICO al que se acogió en 2012 a través del Plan Montoro. Así lo ha confirmado hoy el alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, que tras el regreso de vacaciones ha comparecido ante los medios para dar cuenta de las principales líneas de actuación que seguirá el Equipo de Gobierno durante el último trimestre del año. Un trimestre que se antoja intenso en el apartado económico.
Según ha explicado Lacalle, la aprobación del último decreto por parte del Gobierno ha abierto la puerta a la posibilidad de nuevas vías de financiación más ventajosas para el Consistorio, que en 2012 se acogió a un préstamo de 23 millones de euros para sufragar el pago a proveedores. Ahora, dos años después, la coyuntura económica ha cambiado de manera radical y el precio del dinero es mucho menor, por lo que los intereses de los préstamos han caído varios puntos.
Se espera conseguir financiación privada con tipos de interés por debajo del 3 por ciento
Se espera conseguir financiación privada con tipos de interés por debajo del 3 por ciento
En este escenario, el Consistorio prevé cancelar el crédito del ICO, cuyo tipo de interés se situó en su momento en un 5,9 por ciento, para posteriormente acudir a financiación de entidades privadas. A la espera de conocer las propuestas de las propias entidades, el Equipo de Gobierno prevé que las ofertas se sitúen en torno a unos tipos del 3 por ciento, es decir, casi la mitad, lo que supondrá un “ahorro considerable” en el pago de los intereses. En este sentido, el cálculo inicial sitúa el ahorro en más de 2 millones de euros de aquí a 2022, que es cuando vencía el préstamo del ICO.
Tal y como ha subrayado el alcalde, esta operación es “posible” gracias a dos factores. Por un lado, la rebaja de las exigencias del Gobierno para financiar a los ayuntamientos y por el otro, el cumplimiento de varios requisitos fundamentales, que se centran especialmente en la obtención de superávit y de una estabilidad presupuestaria de las cuentas municipales. Dos requisitos que el Ayuntamiento de Burgos cumple después de los ajustes efectuados en los últimos años y que permitirán afrontar una operación que se espera sea “muy ventajosa” para la ciudad, ha añadido.
Amortización de deuda
A este respecto, Lacalle ha asegurado que las medidas de contención del gasto y equilibrio presupuestario seguirán vigentes a lo largo de los próximos meses. De hecho, desde el Equipo de Gobierno se ha marcado el objetivo de reducir la deuda municipal en otros 15 millones de euros durante el último trimestre de este año. Así, la intención es rebajar la presión económica que soporta el Ayuntamiento y dejarla en 118 millones de euros.
Y ahí no pararán las medidas de ahorro. A la espera de redactar los presupuestos para el año que viene y concretar las partidas en las que se contendrá el gasto, el Ejecutivo local confía en seguir reduciendo la deuda durante el próximo ejercicio con el objetivo de dejarla en 100 millones, es decir, “menos de la mitad” de la deuda acumulada al principio de legislatura, ha subrayado Lacalle.
