Más de 4.000 viviendas consiguen el certificado de eficiencia energética
Burgos es la cuarta provincia, tras Valladolid, León y Salamanca, de un total regional de 34.404 certificaciones otorgadas
Las nuevas construcciones, las rehabilitaciones, las ventas y los cambios de arrendamiento deben pasar estos controles
Se busca desarrollar una nueva generación de edificios que consuma menos energía y reduzca la contaminación
Un año después de la entrada en vigor de la certificación energética de edificios, Castilla y León cuenta ya con 34.404 inscripciones en el registro, el 50 por ciento de las cuales con calificación energética ‘E’ o inferior. Burgos se sitúa como la cuarta provincia con mayor número de viviendas registradas, 4.359, por detrás de Valladolid (8.125), León (6.624) y Salamanca (6.595). Los datos son proporcionales al número de habitantes de cada provincia y a su actividad económica, ya que las certificaciones van vinculadas a la construcción de nuevas viviendas, a la rehabilitación y a los cambios de arrendamientos.
La certificación energética de edificios, puesta en marcha por la Junta de Castilla y León a través del Ente Regional de la Energía, busca conseguir viviendas en las que se ahorre más energía y, por tanto, se reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas. Y es que el 40 por ciento de la energía consumida está vinculada a las viviendas y los inmuebles, de ahí que las nuevas edificaciones, así como aquellas que se rehabiliten, deban realizarse bajo criterios de sostenibilidad medioambiental, fomentando la eficiencia energética.
Incremento de certificados
En esos casos, como en aquellos que se produzca una venta o un cambio de arrendatario, también se deben de presentar los correspondientes certificados de eficiencia energética. Todos ellos forman parte del registro gestionado por la Dirección General de Energía y Minas y el EREN. Desde su puesta en marcha, se han entregado 34.404 certificados con inscripción definitiva. Del tota, 8.125 corresponden a Valladolid, seguida de León con 6.624, y muy de cerca por Salamanca con 6.595. A continuación, figura Burgos, que cuenta con 4.359 evaluaciones, Palencia con 2.177, Segovia 1.960, Ávila 1.722, Zamora 1.683 y Soria con 1.159 certificados.
Según el tipo de calificación otorgada en las certificaciones a los 34.404 edificios con inscripción definitiva en el registro, la evaluación apunta que un 50 por ciento de los inmuebles ha obtenido calificación ‘E’ en cuanto a las emisiones de CO2 producidas por los edificios. La normativa europea establece niveles de eficiencia energética que parte de la ‘G’ (la menos eficiente) a la ‘A’, la más eficiente. Hay que ser conscientes de que las certificaciones energéticas se hacen en todo tipo de inmuebles independientemente de su antigüedad.
Más controles
Además, la Junta de Castilla y León trabaja en estos momentos para la puesta en marcha de un sistema de control de los certificados inscritos. El objetivo es comprobar la validez de los datos de base utilizados para expedir los certificados, verificar los resultados de cálculo de la calificación y la realización de visitas sin situ a los inmuebles, comprobando la correspondencia entre los edificios o viviendas y las especificaciones que constan en sus certificados, realizando para ello pruebas y mediciones. Durante 2014 y 2015 se llevarán a cabo un mínimo de 801 controles que abarcarán los diferentes tipos de edificios o viviendas.