Huertos urbanos, nueva fórmula de inserción laboral
El Ayuntamiento de Miranda y Cáritas ponen en marcha un proyecto destinado a los desempleados en riesgo de exclusión social
Se habilitarán huertos urbanos en los que aprender sobre producción hortofrutícola como alternativa laboral
Convertidos en cultivadores profesionales, los participantes podrán comercializar sus productos
El Ayuntamiento de Miranda de Ebro y Cáritas ponen en marcha el Proyecto Formativo en Agroecología para emprendedores, una iniciativa que busca favorecer la inserción laboral de personas desempleadas o en riesgos de exclusión social, a través de la creación de huertos urbanos. El objetivo es poner a disposición de los participantes una serie de parcelas municipales, en las que llevar a cabo tareas formativas relacionadas con la producción hortofrutícola. Aprenderán sobre el funcionamiento del sector primario, convirtiéndolo en una alternativa laboral real, al mismo tiempo que obtendrán productos para su consumo directo.
De acuerdo con el convenio firmado esta mañana, el Ayuntamiento pondrá a disposición del proyecto, para la primera de las fases, un total de 20.574 metros cuadrados de suelo, que se dividirán entre 15 y 20 parcelas de unos 300 metros cuadrados cada una. Inicialmente participarán alrededor de 20 personas, tanto parados en exclusión social, como familias en situación de desventaja socioeconómica derivada de la crisis o personas con dificultades de acceso al mercado laboral y/o deficiente cualificación formativa.
Se comenzará combinando las clases teóricas con las prácticas para la preparación de los terrenos para su posterior cultivo, durante los meses de diciembre, enero y febrero. Vistos los primeros resultados dará comienzo la segunda fase, con una ampliación de terrenos en 18.000 metros cuadros, dirigida al producción de excedentes. A continuación, se incorporaría una nueva remesa de participantes, al mismo tiempo que se llevarían a cabo acciones de promoción de los pequeños productores ya consolidados, con el inicio de la comercialización. La tercera fase estaría enfocada a la profesionalización de la actividad.
El proyecto estará en todo momento tutelado por Cáritas, y supondrá que el Ayuntamiento ceda un terreno de 35.574 metros cuadrados, en un espacio que linda con las instalaciones deportivas municipales ‘José García’. La finca se vallará, al mismo tiempo que se instalará un sistema de riego. Además, se dejarán las instalaciones de los invernaderos municipales para la custodia del material, así como para su uso como semillero o planteo. La cesión será por un periodo de tres años, prorrogable hasta otro máximo de tres, y tiene un coste anual de 40.000 euros, de los que el Ayuntamiento aportará 20.000.