El Mirandés deberá esperar otra semana para conocer su futuro
Racing de Santander y Real Murcia se inscriben en la Liga Adelante, pero la LFP se da un plazo de siete días para estudiar la documentación
Ambos clubes han recurrido las negativas de Hacienda a aplazar el pago de la deuda
El Mirandés ya está en pretemporada. CDM
El CD Mirandés deberá esperar otra semana más para saber de manera definitiva en que categoría jugará la próxima campaña. Y es que, tanto Racing de Santander como Real Murcia formalizaron ayer su inscripción y presentaron la documentación solicitada por la Liga Profesional de Fútbol (LFP) para competir en Segunda División. Ahora es la LFP la que tiene que estudiar dicha documentación para decidir si cumplen con los requisitos exigidos para participar en la categoría de plata. Si el organismo detecta irregularidades o incumplimientos antes del día 7 de agosto, ambos clubes podrían perder la categoría, siendo el Mirandés el primer beneficiado al haber finalizado la temporada pasada en la décimo novena posición de la tabla.
Según han ido informando en las últimas jornadas tanto Racing como Murcia, la situación económica sigue siendo compleja, aunque ambos han puesto en marcha actuaciones destinadas a intentar solventarla para poder competir en Segunda. En el caso del Racing, la estrategia ha sido doble. Por un lado, los futbolistas que habían denunciado al club por impagos ante la AFE han retirado sus reclamaciones.
Contencioso-Administrativo
Paralelamente, la directiva ha presentado un recurso Contencioso-Administrativo ante la Agencia Tributaria para intentar forzar un nuevo calendario de pagos de la deuda de 6,5 millones de euros. Un recurso que, en caso de ser admitido a trámite, podría abrir la puerta a la participación del equipo en la liga profesional. De momento, los dirigentes del club cántabro aseguran que los últimos movimientos han permitido tener un ratio económico positivo, cumpliendo así la principal exigencia de la LFP.
También el Murcia ha echado mano de la estrategia del recurso Contencioso-Administrativo para intentar alargar los plazos del pago de la deuda que aún mantiene, que se calcula en unos 12 millones de euros. Asimismo, el club pimentonero aseguró en un comunicado oficial que ya había saldado las deudas que aún mantenía con los jugadores tras el pago de unos 700.000 euros.
A dos semanas de arrancar
De esta forma, la pelota está ahora en el tejado de la LFP, que vista la ingente cantidad de documentación recibida de manos de ambos clubes adelantó a última hora de ayer que necesitará varios días para estudiarla y verificar la viabilidad de los dos proyectos. La fecha límite que se ha autoimpuesto el organismo es el 7 de agosto, es decir, el próximo jueves. Será entonces cuando la LFP confirme si Murcia y Racing compiten este año en Segunda o si se les desciende en los despachos.
A partir de ahí, el Mirandés podría beneficiarse de la situación, pero debería darse prisa, ya que la liga comienza dos semanas después y todavía no se ha cerrado la plantilla ni se han realizado muchas de las actuaciones necesarias para competir en la Liga Adelante.