El CSN establece los requisitos para que Garoña pueda seguir operando

El Consejo de Seguridad Nuclear exige verificar el estado de conservación de los equipos y un calendario de modificaciones de diseño de la central

También exige mejorar equipos y protocolos tras el accidente de Fukushima

Nuclenor tiene de plazo hasta el 30 de septiembre para presentar la nueva documentación

A la segunda ha ido la vencida. Dos semanas después de reunirse por primera vez para tratar el tema, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha anunciado hoy los requisitos y la documentación adicional que deberá aportar Nuclenor antes del 30 de septiembre para que pueda optar a un informe favorable del organismo. Según ha destacado el propio Consejo tras la reunión del Pleno de esta mañana, la instalación del Valle de Tobalina deberá implementar la documentación aportada inicialmente y realizar una serie de modificaciones en el diseño para seguir operando.

El CSN exige nuevas modificaciones de diseño de la central

La Instrucción Técnica Complementaria (ITC), que ha salido adelante con cuatro votos a favor y el voto en contra de la socialista Cristina Narbona, que formulará un voto particular, contempla una serie de actuaciones que Nuclenor deberá acometer y/o programar en los próximos meses para que reciba el beneplácito del CSN. Entre los requisitos más importantes destaca la implantación de varias modificaciones de diseño, como la instalación de un Centro Alternativo de Gestión de Emergencias (CAGE), como lugar seguro desde donde dirigir una situación de accidente severo.

También se exige la puesta en funcionamiento de un sistema de venteo filtrado para despresurizar y mantener la integridad estructural de la contención, evitando mediante los filtros la emisión de radiactividad al exterior de la central y la instalación de nuevos equipos recombinadores de hidrógeno en el edificio del reactor para evitar explosiones de este gas.

Estas modificaciones se unen a las ya exigidas en 2009 y que finalmente no se llevaron a efecto debido al cese de explotación de la central. En este caso, el CSN también exige la instalación de un nuevo sistema para el tratamiento y control de los gases radiactivos en los diversos recintos y estructuras de la contención en caso de accidente, así como la mejora del aislamiento de la contención primaria para su sellado en caso de accidente y la mejora de la independencia de equipos y cables eléctricos.

Fukushima y pruebas de resistencia

Todos estos requisitos se unen a los planteados de manera general por el CSN tras el accidente de Fukushima y las posteriores pruebas de resistencia europeas. En este aspecto, Garoña también deberá superar las revisiones del estado de sus equipos, sobre todo de los más comprometidos con la seguridad de la planta, como el propio reactor.

Así, la ITC contempla una inspección de la vasija para descartar defectos similares a los detectados en la central nuclear belga de Döel, de un modelo similar a la de Garoña y que tuvo que parar recientemente. También se deberá verificar el buen estado de los mecanismos de inserción de las barras de control y del resto de componentes internos de la vasija del reactor, incluidas las soldaduras circunferenciales.

Aparte, y de manera genérica, se plantean otros requisitos adicionales vinculados a la mejora de la formación de los equipos humanos, tanto los dedicados a la operación de la central como los vinculados a los protocolos de emergencia.

Hasta el 30 de septiembre

Una vez conocidos los nuevos requisitos planteados por el CSN, Nuclenor tiene de plazo hasta el 30 de septiembre para aportar la documentación exigida y presentar un plan con el calendario de actuaciones a llevar a cabo. Un calendario que deberá ser aprobado por el propio Consejo antes de decidir en torno a la renovación de licencia de explotación solicitada por Nuclenor a finales de mayo.

Por el momento, desde el empresa se guarda silencio ante los nuevos requisitos a la espera de recibir la notificación oficial por parte del CSN. Sin embargo, sus responsables insisten en la “buena disposición” de Nuclenor “para completar o aclarar cualquier aspecto de la documentación presentada” y “facilitar cuanta información se estime pertinente para la renovación” de la licencia de explotación.