Quesada: “Hay buen material” en el Burgos CF para intentar el ascenso
El central se ha decidido por el Burgos porque le han “hablado bien” del club
Asegura dominar el juego aéreo y le gusta probar suerte en ataque
Carlos Quesada ya luce la camiseta del Burgos. GIT
Tras unos días de aclimatación, el central alicantino Carlos Quesada ya está totalmente integrado en el Burgos CF. Así lo ha reconocido el propio Quesada, que a pesar de llevar ya varios días en la ciudad ha sido presentado esta mañana en El Plantío, donde ha reconocido que “hay buen material” en el equipo para intentar pelear por los puestos de play off. “Un ascenso aquí sería otra historia” diferente al conseguido con el Guadalajara en Anduva hace tres años, ha señalado.
El defensa, nacido en Crevillente hace 29 años, se ha definido como una persona “muy competitiva” a la que le encanta “ganar”, razón por la que finalmente se ha decidido por el Burgos. “Había alguna opción más” sobre la mesa, pero “me habían hablado muy bien” del club burgalés y finalmente se ha comprometido por un año.
En este sentido, ha reconocido, su camino ya se cruzó años atrás con el del club, que intentó ficharle tras su etapa en el Elche, equipo en el que se formó y con el que llegó a debutar en Segunda División. Sin embargo, al final recaló en el Real Jaén. De allí pasó al Orihuela (07/08) y posteriormente al Guadalajara (07/11), con el que logró el ascenso a Segunda frente al Mirandés.
Otra vez el Mirandés
En la siguiente temporada, y defendiendo la camiseta del Atlético Baleares, Quesada volvió a enfrentarse con el conjunto de Anduva en la final por el ascenso a la categoría de plata, pero en esa ocasión el Mirandés se impuso en las islas. A partir de ahí, el central alicantino se marchó al UCAM Murcia y posteriormente al Reus Deportivo, con el que la temporada pasada disputó un total de 27 encuentros y marcó dos goles.
Respecto a sus características futbolísticas, el propio Quesada ha señalado que domina el juego aéreo e intenta aprovecharlo también en acciones de ataque. “La Segunda B es una categoría donde hay que dejar la puerta a cero”, pero en la que tampoco hay que olvidar el aspecto ofensivo. “Me encanta subir a rematar” e incluso “algún entrenador” le ha llegado a situar en momentos puntuales como delantero, ha señalado.
