La pirotécnica Hermanos Ferrández también tuvo problemas en Pamplona
Un fallo técnico les impidió completar la sesión prevista, lo que da alas a la hipótesis municipal sobre su responsabilidad en el accidente de Burgos
IU ha pedido en el Pleno que se expediente a Sedano y Manrique por mentir sobre las distancias de seguridad
UPyD y PSOE están más interesados en conocer los resultados de la investigación judicial
El accidente ocurrido durante la sesión de fuegos artificiales del 30 de junio, en el que resultaron heridas 24 personas por quemaduras y contusiones, ha tenido también su hueco en el Pleno Ordinario celebrado esta mañana. El portavoz de Izquierda Unida, Raúl Salinero, llevaba una proposición para exigir que se abriese expediente disciplinario a los máximos responsables de Seguridad del Ayuntamiento de Burgos por mentir, tanto al Equipo de Gobierno como a los miembros de la oposición, en sus informes sobre el cumplimiento del Plan de Seguridad y Emergencias.
Salinero ha recordado que en los informes elaborados por Fernando Sedano, el intendente jefe de la Policía Local, y Angélica Manrique, la técnico de Protección Civil, se establece que la distancia de seguridad entre la zona de lanzamiento y el público ubicado sobre el Puente de San Pablo debía ser de 96 metros, cuando el Reglamento de Artículos Pirotécnicos y Cartuchería fija claramente que tenía que ser de 120 metros. No se trata de ningún error de cálculo, ha insistido el portavoz de IU, sino de un intento de manipulación, después de comprobar que el Plan de Seguridad no se había cumplido durante la sesión accidentada.
Es más, Salinero ha afirmado que en la reunión de ayer mantenida con Sedano y Manrique pudo comprobar “con dos sencillas preguntas” que es así, que no se cumplió el Plan de Seguridad, ” y que nos mintieron” durante la convocatoria extraordinaria del Instituto Municipal de Cultura y Turismo. Por ello, porque “no podemos permitir que unos técnicos municipales nos mientan”, el Ayuntamiento debe abrir expediente sancionador, con independencia de las responsabilidades penales o civiles que se les puedan exigir cuando acabe la investigación iniciada por el juzgado.
Mejor esperar al informe policial
Desde el Equipo de Gobierno han insistido en defender que se cumplió con todas las medidas de seguridad, y que el protocolo de actuación era el correcto. El presidente del IMC, Fernando Gómez, ha recordado que el Plan de Seguridad y Emergencias recibió el visto bueno de la Subdelegación del Gobierno, administración que también se personó en la zona de lanzamiento de los fuegos artificiales para comprobar que la instalación de la empresa cumplía con todas las medidas. Además, tanto los informes de Sedano y Manrique, como el de Policía Local, certifican que se cumplió con la seguridad.
“No somos precisamente los políticos los que podemos concluir dónde ocurrió el accidente ni por qué”
Por ello, y porque el caso está bajo investigación judicial, Gómez considera que “plantear una cuestión sancionadora, cuando nadie tiene claro cuáles fueron las causas del accidente, me parece un planteamiento populista”. El responsable municipal aboga por esperar a conocer el informe de Policía Judicial, de los Tedax y la resolución de los juzgados, para tomar una decisión sobre la asunción de responsabilidades en el Ayuntamiento de Burgos. Y es que, el Equipo de Gobierno sigue insistiendo en que fue culpa más de la empresa, Hermanos Ferrández, que del Consistorio.
De hecho, Gómez ha explicado que Hermanos Ferrández tuvo otro problema, días después del accidente de Burgos, durante las fiestas de San Fermín en Pamplona. Un fallo técnico impidió que se lanzasen todos los fuegos artificiales previstos para la sesión del 12 de julio, de tal modo que los responsables de la empresa tuvieron que retirar más de 800 kilos de pólvora, de los 900 dispuestos para el espectáculo pirotécnico. Además, que la última tirada, la del 5 de julio, se desarrollase en Burgos sin problemas, demuestra que la seguridad estuvo garantizada en todo momento, ha insistido.
No eludir responsabilidades
Para el portavoz del PSOE, Luis Escribano, Sedano y Manrique no calcularon bien la distancia de seguridad, y eso es un “dato irrebatible”, que se puede comprobar en los informes emitidos. Pero lo más importante ahora, más que la sanción a estos responsables de Seguridad, es saber qué fue lo que falló aquel 30 de junio para que se produjese el accidente, a fin de poder evitar que se vuelva a producir. Si algo tienen claro en el PSOE es que, digan lo que digan en el Equipo de Gobierno, algo falló, y la investigación aún no ha determinado que no fuese el Plan de Seguridad.
Por ello, Escribano ha reiterado su petición de convocatoria extraordinaria del IMC, en la que se puedan estudiar todos los informes municipales emitidos al respecto, así como la información de la que se disponga sobre la investigación judicial que se lleva a cabo. A los socialistas les gustaría contar también con la presencia de la empresa responsable de los fuegos, y recibir información precisa sobre las reclamaciones que han presentado los burgaleses afectados por el accidente. La reunión exprés convocada días después no les parece suficiente.
UPyD no quiere hacer política
En cambio, Julián Altable, de Unión Progreso y Democracia, sí que parece satisfecho con las explicaciones dadas por el Equipo de Gobierno. Insistiendo en que su formación no quiere sacar réditos políticos de lo ocurrido, ni hacer juicios de valor o crear alarma social, aboga por esperar a conocer el informe de Policía Judicial para exigir responsabilidades políticas. Altable admite que Sedano y Manrique “no estuvieron ese día precisamente brillantes”, pero “no creo que sea eso motivo para abrir expedientes disciplinarios como si tuviesen la culpa los técnicos”, porque él piensa que no es así, tal y como demuestran los informes.
Por tanto, la proposición de Izquierda Unida de pedir la apertura de un expediente sancionador al intendente jefe y a la técnico de Protección Civil no salió adelante. El Partido Popular votó en contra, mientras que PSOE y UPyD se abstuvieron.