Peñalba denuncia trato de favor a la concesionaria del HUBU
La concejala socialista critica que el Ayuntamiento ha pagado una reparación de 6.000 euros que correspondía a la UTE adjudicataria del Hospital
El contrato se ha adjudicado “a dedo” a la empresa API Movilidad
La reparación de unas baldosas mal instaladas en los accesos al Hospital Universitario de Burgos (HUBU) ha levantado la última polémica entre el PSOE y el equipo de Gobierno municipal. Y es que, lo que podría parecer una actuación menor se ha convertido en un conflicto a tres bandas que la concejala socialista Esther Peñalba ha achacado a la “desidia” y “pasividad” del ejecutivo local, a quien ha acusado de favorecer los intereses de la empresa concesionaria del Hospital y a API Movilidad, encargada de la reparación.
El conflicto viene de lejos. Según ha explicado Peñalba, en marzo del año pasado se emitió un informe en el que se destacaba la mala colocación de un total de 49 baldosas situadas en el acceso principal del Hospital, una obra cuyo arreglo se calculó en 3.540 euros y que en teoría debía asumir la empresa concesionaria del HUBU. Sin embargo, más de un año después y tras varios informes complementarios, el arreglo no parecía tener visos de ser ejecutado, por lo que se procedió a la instalación de “unas planchas” metálicas destinadas a salvar el paso por la zona, lo que supuso un coste para el Ayuntamiento de 650 euros.
Vista la necesidad de acondicionar la zona definitivamente, debido en parte a las numerosas quejas recibidas en el 010 y a dos atestados de la Policía Local por lesiones como consecuencia de tropiezos, el Ayuntamiento dio orden de ejecución de las obras en marzo de 2011, “casi un año después” de documentar los desperfectos. Eso sí, según ha criticado Peñalba, la actuación no se realizó de manera subsidiaria, por lo que la factura no se le pasó a la UTE concesionaria del Hospital, sino que repercutió directamente en las arcas municipales.
API Movilidad
Además, según critica la concejala socialista, el coste de la intervención se disparó desde los 3.540 euros calculados inicialmente a los 6.000 que al final ha costado. ¿Por qué? A juicio de Peñalba porque la actuación la ha realizado API Movilidad, en vez de la brigada de obras. Y lo ha hecho “sin ninguna justificación” evidente, sino recibiendo el contrato “a dedo”, lo que demuestra, según la concejala, una “confabulación de Ibáñez” con la empresa, adjudicataria también de otros contratos municipales en esta materia.
Por todo ello, Peñalba ha solicitado que se retirara del orden del día de la Comisión de Licencias celebrada hoy la aprobación del reconocimiento extrajudicial de crédito necesario para abonar la factura, considerando que ha sido “una actuación fuera de contrato” que ha beneficiado tanto a API Movilidad como a la concesionaria del HUBU. “Los burgaleses han regalado 6.000 euros a una empresa que hace negocio con la Sanidad”, ha subrayado la concejala al tiempo que recordaba que éste es un capítulo más en el “encadenamiento de despropósitos” en los que se encuentra inmerso el equipo de Gobierno.