La Fiscalía vigilará las barracas durante toda la feria
Entre la denuncia vecinal y los informes municipales, el fiscal no detecta indicios de delito
Aún así, controlará las medidas de seguridad, las conexiones eléctricas y la instalación de casetas y atracciones
Si detecta algún tipo de irregularidad, podría denunciarla directamente al juez
Muchos ojos vigilarán durante estos días las barracas de las Fiestas de San Pedro y San Pablo ubicadas en el Polígono Docente del Vena, comenzando por los de la Fiscalía de Burgos. Ante la denuncia presentada por la Asociación de Vecinos ‘Nuestra Señora de las Nieves’ de la Barriada de Illera, y tras estudiar los documentos e informes remitidos por el Instituto Municipal de Cultura y Turismo, el fiscal ha decidido valorar sobre el terreno las medidas de seguridad, las conexiones eléctricas, el abastecimiento de agua y, en general, toda la instalación de las casetas y atracciones de feria.
La presidenta de ‘Nuestra Señora de las Nieves’, Delia Ventureira, explica que el fiscal “no ha visto ‘a priori’ que exista delito”. Los informes municipales defienden la seguridad de la instalación y sólo con la denuncia vecinal no es suficiente para impedir el desarrollo de las barracas. Sin embargo, no está dispuesto a archivar dicha denuncia y vigilará de cerca las barracas durante los diez días de fiesta. Si en algún caso detecta una irregularidad o indicio de delito, el fiscal llevará el caso directamente ante el juez, que es el único que puede dar orden de clausurar la feria.
Del mismo modo, Ventureira asegura que con la información recabada durante estas fiestas la Fiscalía podrá tomar decisiones de cara a futuro, con incluso una denuncia propia, que afectaría ya a la feria del próximo año. La presidenta de la asociación de vecinos de la Barriada de Illera se muestra, a pesar de todo, satisfecha. La Fiscalía tiene mucho trabajo y, aún así, ha tenido en consideración la denuncia vecinal, ha abierto un expediente y continúa con las diligencias. Para ellos, reconoce Ventureira, habría sido más fácil decretar el archivo de la denuncia y olvidarse de todo, pero no lo han hecho.
Algunas mejoras
Por el momento, y según lo que han podido comprobar los vecinos, el Ayuntamiento ha incrementado algunas medidas de seguridad. Por ejemplo, los pasillos de evacuación están mejor delimitados, con vallas de un tamaño mayor y ensambladas, aunque Ventureira insiste en que las ambulancias no podrán pasar por la zona del ‘María Madre’, porque la marquesina se lo impide. Además, la presidenta de la asociación vecinal teme que, en los momento álgidos de la feria, las vallas se acaben moviendo y arrinconándose contra las paredes de los edificios.
Lo más importante para Delia Ventureira es “no pase nada grave a nadie”. La principal preocupación de los vecinos de la Barriada de Illera, más allá de los ruidos que se derivan de las barracas, es la seguridad de la zona. Está pegando a numerosas construcciones, tanto particulares como docentes, y en otras ocasiones las conexiones energía, así como las de saneamiento y abastecimiento de aguas, no han sido las más adecuadas. El pasado año, el Ayuntamiento reorganizó las barracas, instalándolas un uno sólo de los lados de las calles Eloy García de Quevedo y Francisco de Vitoria, ubicación que se se repite ahora.