Llamada a la fe y la caridad en el Corpus Christi

Cientos de burgaleses se reafirman en la Fe Cristiana, reconociendo la presencia de Jesús en la tierra

El arzobispo Gil Hellin hace un llamamiento a la caridad cristiana y al amor al prójimo, como muestra de amor a Dios

La Asociación Pro-Corpus engalana la ciudad con cuatro altares menores durante el recorrido de la procesión

Llamada a la fe y la caridad en el Corpus Christi La procesión del Corpus Christi partió de la Catedral. IAC

El Corpus Christi es la fiesta de la reafirmación en la Fe Cristiana. Honrando la Sagrada Hostia en procesión, se cree en la conversión del cuerpo y la sangre de Cristo en pan y vino; se reconoce su presencia entre los hombres, muriendo por su salvación. Cientos de burgaleses se han reafirmado esta mañana en esta fe, participando de la Santa Misa concelebrada en la Catedral, en presencia del arzobispo de Burgos, Francisco Gil Hellín, y de la posterior procesión por las calles del centro histórico, que en esta ocasión han estado engalanadas con varios altares menores, promovidos por al Asociación Pro-Corpus de Burgos.

“No nos cansemos de hacer el bien”

Durante la homilía, Gil Hellín ha aprovechado para recordar el verdadero sentido de la celebración del Corpus, como fiesta de reconocimiento del paso de Jesucristo entre nosotros. Fue el Papa Urbano IV quien, en 1264, instituyó la fiesta, siguiendo una devoción popular. Y es que habían sido los propios cristianos quienes, ante las dudas paganas sobre la presencia de Cristo en la tierra, simbolizada en la conversión de su cuerpo y sangre en pan y vino, empezaron a celebrar el culto a la Eucaristía fuera de las iglesias. El Santo Padre lo introdujo como parte de la misa, quedándose como un reflejo de la verdadera Fe Cristiana.

Amor al prójimo

El arzobispo de Burgos ha insistido en la necesidad de promover el culto a la Eucaristía dentro y fuera de la misa. A los sacerdotes les ha pedido que “no tengáis miedo en estimular” cualquier tipo de adoración diurna o nocturna, la misa diaria, porque así se conseguirá una parroquia “viva, apostólica, misionera y caritativa”. Es precisamente por ese motivo por el que la festividad del Corpus Christi se ha instaurado también como Día de Cáritas, puesto que “donde hay verdadera Eucharistía, hay verdadera caridad”, son inseparables, “nade puede amar a Dios e ignorar al prójimo” y viceversa.

El arzobispo Gil Hellín bendice a los burgaleses. IAC

El arzobispo Gil Hellín bendice a los burgaleses. IAC

“No podemos ir los unos contra los otros”, ni olvidarnos de aquellos que pasan por dificultades, sobre todo en estos momentos de crisis económica, en los que se incrementan las necesidades. Francisco Gil Hellín ha hecho un llamamiento a la caridad cristiana, a hacer el bien, y a difundir el mensaje de Dios entre la sociedad. Una tarea que también ha dejado en manos de los niños de 1ª Comunión, que acaban de recibir a Cristo, a los que ha definido como “sagrarios” de la Fe Cristiana, portadores de un “corazón noble y sencillo”.

Devoción y curiosidad

Cientos de burgaleses han acompañado la Hostia Consagrada en procesión por las calles del centro de la ciudad, movidos por la devoción pero también por la curiosidad. Igual que en el Catedral se entremezclaban los fieles con los turistas, que aprovechaban la apertura de la Seo burgalesa para admirar su rico patrimonio y disfrutar de las gracias del Papamoscas, en la procesión muchos de los participantes lo hacían movidos por algunas de novedad de este año, los altares menores colocados en La Paloma, Plaza Mayor, Teatro Principal y Arco de Santa María, que han servido para engalanar la ciudad.

Un año más, el arzobispo de Burgos ha bendecido al pueblo burgalés desde los balcones de la Casa Consistorial, mientras se entonaba el Himno a España, y bajo la atenta mirada del alcalde, Javeir Lacalle, y el presidente de la Diputación, César Rico. Tras la procesión, que ha durado cerca de hora y media, el Santísimo ha quedado expuesto en la Capilla del Santo Cristo hasta las 19:00. Los juegos del calendario han hecho que, en esta ocasión, la celebración del Corpus Christi se haya realizado después del Curpillos y en vísperas de las Fiestas de San Pedro y San Pablo.