Detenidos dos ladrones de viviendas en La Ribera
La Guardia Civil detiene a los autores de dos robos en la comarca de La Ribera y recupera una moneda de oro del siglo XIX
El Seprona imputa a una mujer de 71 años el envenenamiento de unos gatos domésticos
La Guardia Civil ha detenido a un hombre y una mujer, T.T.H. y H.T.H. de 39 y 42 años de edad respectivamente, como presuntos autores de dos robos con fuerza (uno en grado de tentativa) cometidos en sendas viviendas de dos localidades ubicadas en La Ribera.
Según informan fuentes de la Benemérita, los hechos ocurrieron en noviembre del pasado año. Los autores penetraron por la fuerza en una vivienda unifamiliar, sustrayendo entre otros objetos y joyas, una moneda de gran valor económico e histórico. Esa misma noche, se producía un hecho similar en otra vivienda cercana, desistiendo sin llevarse nada.
Tras la recepción de las denuncias presentadas por los perjudicados, el Equipo de Policía Judicial de Aranda de Duero abría una investigación. Las inspecciones oculares practicadas en ambos domicilios arrojaban resultados parecidos, encontrando similitudes entre los dos casos.
Las gestiones practicadas permitieron identificar, localizar y detener a los dos coautores de los hechos y recuperar uno de los objetos sustraídos, una pieza de oro del siglo XIX, concretamente una moneda de 4 escudos de la Reina Isabel II, acuñada en el año 1865.
Según ha podido descubrir la Guardia Civil, los autores realizaban un estudio previo de los posibles objetivos, todos ellos ubicados en travesías con fácil vía de escape en caso de necesidad. Actuaban de noche, en casas habitadas, aprovechando la ausencia puntual de los moradores, para entrar en ellas a través del primer piso, donde entraban por la fuerza rompiendo una ventana. Una vez dentro, los ladrones hacían acopio de objetos de valor y joyas, de rápida y fácil introducción en el mercado, obteniendo pingües beneficios a corto plazo.
Los detenidos habían residido anteriormente en la comarca y actualmente se encontraban en paradero desconocido. La investigación llevada a cabo por el Equipo de Policía Judicial de Aranda de Duero, con la colaboración de UOPJ de Burgos, sigue abierta, tendente a la recuperación del resto de efectos sustraídos.
Localización de un anciano
También la Guardia Civil de Aranda localizó en la tarde del pasado martes 3 de junio a un hombre de 92 años de edad, vecino de La Ribera, cuya desaparición fue comunicada esa misma tarde por un familiar. El anciano se encontraba en buen estado de salud, acompañado de otros mayores.
Un familiar comunicaba que se había ausentado a media mañana de su domicilio, ubicado en una localidad de La Ribera, con destino a Aranda de Duero. Alarmada por la ausencia, ya que no había regresado, comunicó tal circunstancia. En respuesta al Plan Mayor Seguridad, puesto en marcha por Secretaría de Estado de Seguridad, se activó un dispositivo de búsqueda y localización de la persona, con la participación de varias patrullas de seguridad ciudadana de la comarca.
Mientras varios agentes se desplazaban al domicilio para recabar más información (costumbres, fotografías, hábitos o amistades del entorno del desaparecido), otras patrullas se disponían para su búsqueda por las calles de la capital ribereña y apenas 45 minutos después se localizaba al anciano en el casco urbano de Aranda, acompañado de otras personas de edad similar.
Gatos envenenados
Por otra parte, el Seprona ha imputado a una mujer de 71 años de edad, vecina de una localidad perteneciente al Alfoz de Burgos, un delito de maltrato de animales domésticos, como supuesta autora del envenenamiento de seis gatos domésticos.
Según informan fuentes de la Comandancia de Burgos, los hechos ocurrieron el pasado mes de mayo, cuando un vecino comunicó la aparición de varios gatos muertos y otros heridos en circunstancias sospechosas. Una Patrulla del Seprona se personó en el lugar, comprobando como dos gatos domésticos yacían muertos y otros presentaban síntomas de haber sido envenenados.
Por este motivo se abrieron diligencias ante la sospecha de un posible delito contra el Medio Ambiente, recogiendo muestras halladas en el paraje y restos de pescado que habían ingerido para su análisis. La investigación abierta ha permitido identificar y localizar a la autora de los hechos, en el entorno familiar del propietario de los animales, a la que se le ha imputado un delito de maltrato de animales domésticos