El pasado año 2.132 burgaleses intentaron dejar de fumar

Un 16% de los castellanos y leoneses que intentaron dejar de fumar en 2013, eran burgaleses

En Burgos se realizaron 789 controles en establecimientos y se abrieron 76 expedientes

El pasado año 2.132 burgaleses intentaron dejar de fumar

En 2013 un total de 16.408 castellanos y leoneses recurrieron a su médico de cabecera para dejar de fumar. De todos ellos, el 13% son burgaleses (2.132). Son cifras que se desprenden en víspera del ‘Día Mundial Sin Tabaco’, una jornada que ha sido establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) con el fin de divulgar los riesgos para la salud que conlleva fumar y promover medidas que ayuden a reducir el tabaquismo.

El tabaco mata anualmente a cerca de seis millones de personas en todo el mundo. El consumo de esta sustancia acelera el ritmo del corazón y afecta a las arterias, convirtiéndose así en una de las principales causas de infarto agudo de miocardio, accidentes cerebrovasculares, cáncer o enfermedades pulmonares, entre otros problemas de salud. Por eso, el Sistema Regional de Salud incluye desde el año 2005, dentro de su cartera de servicios, una oferta de acciones de deshabituación tabáquica para todos aquellos ciudadanos que quieran dejar este hábito. Este servicio se facilita desde los centros de atención primaria y se accede a él a través de la figura del médico de cabecera.

El protocolo de deshabituación para las personas que desean dejar de fumar se adecua a las características de cada persona, pudiendo requerir o no tratamiento farmacológico en función del grado de dependencia nicotínica, pero incluyendo siempre el apoyo psicológico del profesional sanitario y el seguimiento del paciente para evitar recaídas. Asimismo, este servicio se completa con la existencia de una guía práctica para dejar de fumar, a la que se puede acceder a través del Portal de Salud de Castilla y León. Guía práctica para dejar de fumar CyL.

Controles sanitarios

Los problemas de salud originados por el tabaco no sólo afectan a los fumadores, sino también a aquellas personas que inhalan el humo de manera pasiva. Y, por eso, los servicios de inspección de la Consejería de Sanidad realizaron, a lo largo de 2013, un total de 6.376 controles en los establecimientos públicos de la Comunidad. En Burgos, se realizaron 789 controles, de los cuales, 76 resultaron positivos y se abrió un expediente sanitario.

De esta manera, se garantiza el cumplimiento de la normativa vigente en esta materia y se protege la salud pública comprobando, por ejemplo, que no se facilita el acceso al tabaco a los menores de edad o que los puntos de venta están correctamente señalizados.