La residencia para enfermos mentales funcionará a finales de año

La gestión del servicio dependiente de la Junta sale mañana a concurso público

Atenderá a personas con enfermedad mental grave pero estabilizada, para promover su autonomía personal

El edificio, en el barrio de Las Huelgas, está construido y equipado desde 2011

La residencia para enfermos mentales funcionará a finales de año Residencia para enfermos mentales. BC

Parece que esta vez es la definitiva. El Boletín Oficial de Castilla y León publica mañana la licitación de la gestión de la residencia para enfermos mentales de Burgos, dos años después de que el edificio, propiedad de la Junta, esté finalizado y equipado. Las entidades, empresas, asociaciones o colectivos interesados en llevar esta nueva instalación, destinada a personas con enfermedad mental grave pero estabilizada, podrán presentar sus ofertas de manera inmediata, según la consejera de Servicios Sociales, Milagros Marcos, quien ha asegurado que la residencia estará en funcionamiento antes de que finalice este año.

El contrato de gestión de la residencia para enfermos mentales, ubicada en el barrio de Las Huelgas de la capital, tendrá una duración de tres años, y un coste aproximado de 1,5 millones de euros. Marcos ha explicado que el servicio irá ampliándose progresivamente, aunque inicialmente sólo estarán operativas 20 de las 40 plazas previstas. La atención estará destinada a personas de entre 16 y 65 años, que padezcan una discapacidad mental grave, prolongada y estabilizada, sin necesidad de cuidado sanitario específico, pero sí de una atención que contribuya a su autonomía personal y a mejorar la calidad de vida.

La residencia ofrecerá estancias indefinidas, medias y temporales, aunque la idea sigue siendo, según Marcos, que sea un recurso de “entrada y salida”, no de residencia permanente. Se ofrece acogida, alojamiento, manutención, cuidado y apoyo personal y social, adaptado todo ello a las necesidades de cada uno de los usuarios. Atención profesional 24 horas al día, los 365 días al año, de ahí las dificultades que han tenido desde el Gobierno Regional para elaborar el pliego de condiciones con el que sacar a concurso el servicio.

Desde 2011

La residencia para enfermos mentales de Burgos está construida sobre una superficie de más de 2.000 metros cuadrados. El edificio cuenta con un vestíbulo de recepción, un área de espacios generales para la realización de actividades recreativas, culturales y lúdicas, así como con un área de servicios generales para albergar la cocina, la lavandería, los almacenes. La zona residencial dispone de cuatro módulos independizados, con habitaciones individuales y baño incorporado, así como salas de estar. La Junta de Castilla y León recibió las obras en enero de 2011 y, desde entonces, el edificio ha estado cerrado, aunque equipado.